Soraya Rodríguez no renunció a la pensión indemnizatoria hasta que la ley la obligó

Sólo tres altos cargos son perceptores en la actualidad de una pensión indemnizatoria, según una respuesta parlamentaria que el Gobierno ha remitido al Congreso. Hasta julio de 2012, la pensión indemnizatoria era compatible con casi cualquier otra percepción, salvo con el desempeño de un puesto que generara también derecho a pensión indemnizatoria. Sin embargo, a partir de esa fecha, por voluntad del Gobierno se introdujo una medida de austeridad y racionalidad que ha variado significativamente lo que venía ocurriendo en relación a este asunto, produciendo un ahorro que va más allá de su valor económico.

A raíz de la entrada en vigor del nuevo régimen de incompatibilidades, con arreglo al Real Decreto Ley 20/2012 de 13 del mes de julio, que establecía su incompatibilidad con el cobro de cualquier otro salario, renunciaron expresa o tácitamente a la misma un total de 51 perceptores en el ámbito de la Administración General del Estado. Optaron por continuar percibiéndola 6 personas, algunas han renunciado con posterioridad o han terminado de cobrar las mensualidades que les correspondían, por lo que actualmente hay tres perceptores. Han renunciado o dejado de percibir dichas pensiones 54 personas sobre un universo total de 57.

Las pensiones indemnizatorias las pueden percibir ex miembros del Gobierno (presidente, vicepresidentes y ministros) y ex secretarios de Estado y asimilados, además de ex miembros de otros ámbitos institucionales. Por tipologías, de las personas que renunciaron 18 habían sido miembros del Gobierno (un ex presidente, tres ex vicepresidentes y quince ex ministros) y 36 eran ex secretarios de Estado o asimilados.

Cuantías según el cargo

En julio de 2012 las cuantías mensuales de la pensión indemnizatoria eran las siguientes: el ex presidente del Gobierno, 5.212,34 euros; el ex vicepresidente, 4.899,09 euros; el ex ministro, 4.598,79 euros, y el ex secretario de Estado, 6.311,40 euros.

La actual portavoz parlamentaria del PSOE, Soraya Rodríguez, ex secretaria de Estado de Cooperación, siguió cobrando los más de 6.000 euros de la pensión indemnizatoria hasta que la ley la obligó a renunciar a ellos.

Otros altos cargos socialistas renunciaron por decisión propia antes de que se impusiese la obligación legal. Ella, sin embargo, sólo lo hizo cuando la ley no le dejó otra opción.