Tardà tacha el juicio de "venganza"y Marchena corta sus "valoraciones políticas"

El diputado de ERC reprocha al Rey que "avalara el "a por ellos"y dice que el 1-O "fue la voluntad de un pueblo indefenso".

El presidente del tribunal del juicio del "procés", Manuel Marchena, ha tenido que interrumpir en varias ocasiones al diputado de ERC Joan Tardà para impedir sus "valoraciones políticas"en su declaración como testigo en la vista. Y es que de forma extemporánea, Tardà aprovechó la primera pregunta del abogado de Vox para quejarse de que el juicio contra los líderes independentistas "está inspirado en la venganza". El magistrado, que antes de que entrara en la sala el testigo ya había advertido a acusaciones y defensas de que no preguntasen a los comparecientes por sus juicios de valor para impedir interrupciones, le ha cortado en seco. "No está usted autorizado a hacer valoraciones políticas pese a su condición de diputado. Se le ha llamado exclusivamente para que ayude a esclarecer los hecho, pero no a través de sus valoraciones", le ha recordado.

Tardá ha intentado contestar en catalán al abogado de Vox, Pedro Fernández, pero Marchena le ha aclarado que como testigo no le asiste ese derecho al estar obligado a expresarse "en la lengua oficial del lugar donde se está celebrando el juicio".

Tras un lapsus que le llevó a dirigirse al parlamentario como "señor Sardá", el presidente del tribunal también ha tenido que corregir al letrado de la acusación popular por recabar en su interrogatorio de Tardà "lo que piensa de lo que hicieron los acusados". "No existe el testigo opinante", ha insistido. Encauzada la comparecencia, el diputado ha negado que el referéndum soberanista del 1-O respondiese a una unidad de acción del independentismo. "Fue la voluntad de un pueblo indefenso, cívico, pacífico y democrática", ha dicho antes de reiterar, como hicieron los acusados, que el soberanismo catalán siempre apostó por una solución "dialogada"a un "conflicto entre demócratas".

Respecto a los altercados durante los registros en la sede de la Consejería de Economía el 20 de septiembre de 2017, el diputado republicano ha hecho hincapié en que "en absoluto"vio acto alguno de violencia y subrayó que "ni la unidad de España ni la independencia de Cataluña valen la más mínima violencia". Asimismo, ha añadido que no podía imaginarse que en el 1-O se produjese algún hecho violento y esgrimió la interpelación que registró el PSOE en el Congreso al día siguiente "por la represión del 1-O"para evidenciar que "la sorpresa o indignación no afectaba solo a los que la habían vivido directamente, sino a cualquier demócrata, incluso a alguien tan alejada de nuestras convicciones como la sra. Margarita Robles"(entonces portavoz socialista en el Congreso, que registró esa iniciativa parlamentaria). Tardá ha achacado al discurso de Felipe VI, "que avaló la represión y el "a por ellos""que esa moción finalmente fuese retirada por el PSOE.

Tras Tardà, estaba prevista la testifical del presidente del Parlament, Roger Torrent, que ha sido aplazada hasta el próximo 4 de marzo porque ha comunicado a la Sala por escrito que su citación coincide hoy con un acto en la Cámara catalana.