Los Esports comienzan a preocuparse por las ciberamenazas

Con el paso de los años, los Esports, han crecido de forma exponencial tanto en número de seguidores como en el dinero que mueve esta industria. Según los datos y el crecimiento, se prevé que los Esports muevan para el año 2021 más de 1700 millones de dólares. Este motivo es el principal motivo por el que los ciberdelincuentes se centren en el mundo de los deportes electrónicos.

El estudio realizado por Trend Micro comenta que los ataques a esta industria se van a ver incrementados de forma exponencial en los próximos tres años, esto se debe que dos factores importantes, el primero de ellos es la cantidad de dinero que mueven y el segundo es que, al realizarse a través de internet, tienen una mayor disposición a ser atacados y de múltiples maneras.

Los ataques más frecuentes que suelen sufrir son:

• Ataques de ramsonware: También conocidos como secuestro de datos, estos ataques restringen una parte de los datos y a cambio, los ciberdelincuentes piden un rescate para devolverlos.
• Ataque de denegación de servicio: Son ataques a una red que provoca que sea inaccesible a los usuarios acceder a ella. Normalmente, estos ataques suelen provocar la perdida de conexión.

Los ataques a esta industria se llevan produciendo desde hace varios años, pero el tipo de amenazas que se realizaban antes tenían una repercusión mucho menor.

Actualmente las ciberamenazas más frecuentes suelen ser las trampas o hacks, que se realizan dentro de los juegos para dar ventaja a los jugadores frente al resto.

El robo de datos personales o bancarios, como ya se produjo hace varios años, cuando unos ciberdelincuentes atacaron los servidores de PlayStation y durante un tiempo pudieron acceder a todos los datos de los usuarios de la plataforma.

Otro de los ataques que suele producirse son los que están destinados a los torneos o competiciones, al tener esta capacidad pueden exigir dinero a los organizadores a cambio de que paren de atacar el torneo.

Por este motivo las organizaciones han comenzado a tomar medidas para prevenir los ataques, mediante la protección de los dispositivos, con protocolos de seguridad y evitando dar datos personales o bancarios.