Sanidad pública

Galicia, pionera en la lucha contra la hepatitis C: casi 10.000 pacientes tratados y eliminación prevista para 2026

Combate la enfermedad, que aún carece de vacuna, con un plan de diagnósticos rápidos y cribados masivos que alcanza un 97% de curaciones

Prueba detección hepatitis C
Prueba detección hepatitisGilead Science

Silenciosa pero potencialmente letal, la Hepatitis C es una enfermedad infecciosa del hígado causada por el virus VHC. Durante años, fue una amenaza invisible: no da síntomas en las primeras fases y puede tardar décadas en manifestarse, cuando el daño hepático ya es severo. Sin vacuna efectiva disponible, la prevención, el diagnóstico precoz y el acceso al tratamiento son las únicas armas reales para combatirla. Y en este frente, Galicia se ha situado a la vanguardia.

El conselleiro de Sanidade, Antonio Gómez Caamaño, destacó este viernes los logros alcanzados en la comunidad desde la implantación del Plan Estratégico para el abordaje de la Hepatitis C en 2015, una hoja de ruta que ha permitido tratar a cerca de 10.000 pacientes con una efectividad terapéutica superior al 97%.

Su intervención tuvo lugar durante el acto de conmemoración del décimo aniversario del Plan Nacional, celebrado en el Edificio Administrativo de San Lázaro, y en el que también participaron la directora general de Salud Pública, Carmen Durán, y el director general de Asistencia Sanitaria, Alfredo Silva.

Estrategia pionera

Galicia fue una de las primeras comunidades autónomas en aplicar de forma decidida la estrategia nacional contra la Hepatitis C, y desde entonces ha mantenido el liderazgo. A finales de 2022, la Xunta puso en marcha un Plan de Eliminación con un objetivo ambicioso: erradicar la enfermedad como problema de salud pública antes de 2026. Esto supone adelantarse en cuatro años a la meta marcada por la Organización Mundial de la Salud, fijada para 2030.

El conselleiro subrayó que, en ausencia de una vacuna eficaz, la labor preventiva es fundamental, especialmente entre los grupos más vulnerables. Pero también lo es contar con herramientas diagnósticas innovadoras que agilicen el acceso al tratamiento.

En ese sentido, Gómez Caamaño puso en valor el diagnóstico en un único paso, que permite detectar e iniciar tratamiento en menos tiempo. Gracias a esta técnica, se logró identificar y caracterizar de forma retrospectiva a más de 250 personas que tenían una infección activa sin saberlo.

Cribado poblacional

Otro de los ejes del plan gallego es el cribado por edad. Desde su implantación, todas las personas de entre 40 y 69 años que acuden a su centro de salud y deben realizarse una analítica por cualquier motivo, son automáticamente evaluadas frente al virus de la Hepatitis C. Si no se les va a realizar una extracción, se les informa igualmente para que puedan decidir si hacerse la prueba.

Hasta el momento, se han realizado más de 280.000 pruebas en este colectivo, lo que ha permitido detectar precozmente 372 casos positivos. La detección temprana resulta clave para evitar la progresión de la enfermedad y para cortar la cadena de transmisión.

Durante su intervención, Gómez Caamaño quiso reconocer el trabajo conjunto de todos los agentes implicados en la estrategia gallega: desde los equipos de atención primaria y hospitalaria del Servizo Galego de Saúde, hasta las asociaciones de pacientes, organizaciones no gubernamentales e incluso instituciones penitenciarias, que desempeñan un papel esencial en el acceso a la atención médica de colectivos tradicionalmente más difíciles de captar.

El titular de Sanidade reivindicó el modelo gallego como ejemplo de cómo una buena planificación, el compromiso profesional y el apoyo institucional pueden hacer realidad un hito sanitario de enorme magnitud: la erradicación de una enfermedad crónica e infecciosa que, hace apenas una década, se cobraba miles de vidas cada año en todo el mundo.