Música

Entrevista

Carlos Rivera: “En el amor, puedo llegar a ser supercursi”

En «Leyendas», su último álbum, homenajea a los grandes de la música iberoamericana que le marcaron el camino. Más de 8 millones de personas le escuchan a diario

Singer Carlos Rivera at photocall for promotion tv show La Voz in Madrid.
Singer Carlos Rivera at photocall for promotion tv show La Voz in Madrid.Sergio R MorenoGTRES

Si echas un vistazo a su biografía y sumas sus logros profesionales, podría tener 85 años. Sin embargo, está en la treintena y su carrera sigue ascendiendo y ascendiendo y ascendiendo… Dice que con «Leyendas», su último álbum, hace un homenaje a todos aquellos grandes de la música iberoamericana que le marcaron el camino. Pues bien, los está adelantando por la derecha a una velocidad que te cag*. Y cantando al amor. Y no regguetenoeando. Más de 8 millones de personas le escuchan a diario. Algo así como Austria entera.

–En «Leyendas», usted, junto a Perales, canta «Un velero llamado Libertad». ¿La libertad en los tiempos del Covid es como el amor en los tiempos del cólera, no?

–Completamente. De hecho, sin querer, esta canción se ha convertido en un grito de libertad.

–¿Corren buenos tiempos para la lírica?

–Eso espero. Te diría que con «Leyendas» hago un homenaje a aquellos grandes artistas que hicieron bandera de las grandes líricas. Ellos fueron mis maestros y marcaron el camino de la música para que, después, pudiéramos transitarlo artistas como yo.

–Comienza gira… No me diga usted que, con la edad, lo de la furgoneta y el bocata no le da una pereza que se muere…

–Depende. Si es para cantar, no importa. Imagínate las ganas que tenía de cantar después de más de un año y medio de no dar conciertos. Podría decirte que, incluso, me apasiona.

–Para usted que viene del Trópico, ¿cómo fue encontrarse en la serranía de Cuenca?

–Para mí, nada de España me es ajeno porque ha sido mi segundo hogar desde hace diez años.

–Hijo Predilecto de Huamantla, ¿cómo se consigue ser profeta en su tierra?

–Estando orgulloso de dónde vienes. Más allá de ser profeta, amo mi tierra. Supongo que mi gente, cuando ve con cuánto amor hablo de mi tierra fuera de ella, les hace ilusión y se sienten honrados.

–Si algún día me dejo caer por allá, dígame qué no debo dejar de hacer por nada del mundo.

–Tiene que visitarla un 14 de agosto. La noche que nadie duerme. Se tienden 7 km de tapetos de flores en la calle. Es algo que sin duda cualquiera tendría que vivir al menos una vez en la vida.

–Suscriba, corrija, añada… ¡Viva México, cabrones!

–¡A huevo! (por supuesto)

–En México siguen siendo todos muy machos o por suerte ya no es tan necesario serlo…

–Depende. Como en todos los países. Por suerte, en muchas cosas, y en esa, hemos evolucionado. En otras, se siguen teniendo esos estancamientos.

–¿Cuándo supo que quería ser una estrella?

–Desde que tengo memoria. Tengo un vídeo con 4 años en un escenario y un micro. Y una foto, con 8, agarrado de la mano de El Puma.

–¿Es posible ser una estrella de la música y que no se le suba a la cabeza?

–Es posible si estás rodeado de personas que te pongan los pies en la tierra y te enseñen que nada de lo que te dicen es totalmente cierto, ni lo bueno y lo malo.

–¿Y que seis millones de personas en Instagram estén atentos a todo lo que cuelgue, diga o haga?

–Pierdo la absoluta proporción de esto. Y son casi siete jajaja… Sin embargo, donde más me gusta saber que hay gente que te sigue es en un concierto o que consume tu música.

–¿Dígame, se puede ser tan arrebatadoramente encantador y educado como lo es usted y ser un ídolo?

–No me gusta tomarme tan en serio y eso me facilita las cosas.

–¿Qué siente cuando ve su fotografía en la carpeta de las quinceañeras? ¿Con quién forraba usted sus carpetas del instituto?

–Me encanta saber que hay personas que tienen ilusión por mi música, por verme, que me hace parte de su vida… Por eso, todo lo que hago lo realizo para estar a la altura de su cariño. Y yo las forraba con, tachán, los Caballeros del Zodiaco.

–Ha hecho series de TV, musicales, teatro… ¿para cuándo el salto a la pantalla grande, le da miedo ganar un Oscar?

–No, al contrario. Si algún día gano el Oscar me gustaría que fuera por una canción. Por cierto, he hecho la música para la última película de Carlos Saura.

–¿Cree en Dios o en Disney?

–Creo en Dios y en las casualidades. Y creo que cuando uno sueña demasiado de niño, puede llegar a atraer lo que tanto ha deseado. Yo era amante de todas las películas de Disney, un ferviente fan de «El Rey león» y eso me llevó después, no sí si por casualidad, por la vida o por Dios, al musical..

–Cuénteme eso que escucha y que no le pega nada de nada.

–El trap (risas). No lo entiendo.

–¿El último disco que ha comprado?

–Consumo música digital… Me da suerte comprar mis discos, por superstición.

–¿Qué es lo que más le chifla y lo que más le amuerma del amor?

-Lo que más me chifla, sentirse amado. Y me amuerma… que soy muy libre.

–¿Qué le pide al ser amado?

–Que no me deje nunca.

–¿Se puede ser romántico sin interrupción?

Mmmmm es que yo puedo llegar a ser súpercursi…

–Dicen que si uno quiere dedicarse al porno, hay que empezar por el nombre artístico y que el mejor es el que se consigue uniendo el nombre de su mascota con el de su calle, ¿cuál sería el suyo?

–Sky Mayo. No está mal, ¿no?