Un gran apoyo

Cayetano, tranquilidad tras la tormenta

El duque de Arjona estrena 2024 alejado de las polémicas familiares y sin problemas económicos

Cayetano Martínez de Irujo.
Cayetano Martínez de Irujo.Alberto R. Roldan La Razón

 Cayetano Martínez de Irujo ha encontrado la estabilidad afectiva y económica. En el primer apartado mantiene una relación estable con Bárbara Mirjan desde la primavera de 2016. La primera vez que se les vio juntos fue en una competición hípica en el Campo de Tiro de Salamanca. Ese mismo día se rendía un homenaje a la duquesa de Alba y el conde de Salvatierra acudió con sus hijos Luis y Amina.

Bárbara Mirjan y Cayetano Martínez de Irujo
Bárbara Mirjan y Cayetano Martínez de IrujoGTRES

La sorpresa fue la visibilidad de la joven, estudiante de Filología. A partir de esa "presentación oficiosa" ya no hubo vuelta atrás. El jinete y su novia aparecían en lugares públicos sin que los paparazzi tuvieran que seguirlos. Ocho años después, la relación está más que consolidada.

Bárbara ha sido el gran apoyo de Martínez de Irujo en momentos muy complicados relacionados con su salud. Ha sabido mantener el equilibrio emocional que supone estar con el hijo de la aristócrata, que en muchas ocasiones ha mostrado su fuerte temperamento con la prensa. Bárbara templaba gaitas ante algunas respuestas fuera de tono a los reporteros de calle. Además, ha sabido dar su espacio a Genoveva Casanova.

No siempre resulta fácil aceptar la presencia de una exmujer en la vida de pareja. En este caso, las dos han puesto de su parte y la relación entre ellas es espléndida. El empresario ha sido una pieza emocional clave en la vida de la mexicana en estos últimos meses, desde que apareció junto al –desde ayer– Rey Federico de Dinamarca en la portada de una revista del corazón. Cayetano sido un gran apoyo para la madre de sus hijos en momentos en los que hubo demasiadas bajas afectivas en la vida de la participante de "MasterChef Celebrity".

Ahora, su "amigo" se ha convertido en el soberano de los daneses, después de que su madre la Reina Margarita le cediera el trono ante la sorpresa de su pueblo y del resto de casas reinantes.

Como en otras ocasiones, Cayetano Martínez de Irujo brindó a Genoveva el Palacio de Arbaizenea para huir de la presión mediática, igual que hizo antes del tsunami para recuperarse del infarto pulmonar que padeció. Este lugar lo cedió la duquesa de Alba a su hijo como donación en el reparto de la herencia. Fue residencia particular hasta que el duque de Arjona decidió explotarlo.

En la actualidad, es uno de los escenarios más especiales para la celebración de eventos y bodas. En Arbaizenea celebraron los mellizos Luis y Amina su mayoría de edad y Leyre Martinez, vocalista de La oreja de Van Gogh, su boda. Esta manera de buscar rentabilidad ha sido un éxito, igual que convertirse en hombre de campo. "He aprendido muchísimo. Yo llevaba todas las fincas de la Casa y, aparte de gustarme, he invertido mucho tiempo en asesorarme y, sobre todo, dinero. Todo lo que he ganado en mi carrera deportiva ha sido para mejorar esta finca. Hay plantaciones nuevas y lo que saco lo vuelvo a invertir. A mí la agricultura me ha salvado", contaba a quien esto firma.

Y en este campo empresarial es donde se ha centrado. Ha comenzado el año gestionando unas cuestiones económicas que arrastraba y que le enfrentaron a dos de sus hermanos. El problema surgió por unos créditos de tres millones de euros que solicitó para realizar un embalse en su finca sevillana a través de la sociedad en la que también participaban. Estos pidieron a su vez un aval por esa cantidad por posibles riesgos futuros, que originó un enfrentamiento al no estar de acuerdo el jinete con en esta petición.

Las cuentas claras y fin de la contienda

El asunto de los créditos y avales fue el detonante de un contencioso que volvió a separar a los hijos de la duquesa de Alba. El conde de Salvatierra lo ha solucionado para entrar con buen pie en 2024 y así lo explica: "Los tres créditos concernientes a la construcción del embalse están ya fuera de Eurotécnica y en una sociedad mía personal. Ha sido una gestión de cuatro meses difícil, costosa y muy laboriosa, más en los tiempos que corren". Ha sido una manera de aclarar la gestión de la sociedad compartida y que engloba las tres fincas donadas por Cayetana de Alba. Es decir, La Pizana, de Eugenia; Aljóbar, de Alfonso; y Las Arroyuelas, de Cayetano.