Despidos

«Los Bardem son una gran mentira»

Los ex empleados de La Bardemcilla rompen su silencio pese a la prohibición del clan. Tras cobrar la indemnización por el despido, varios trabajadores descubren a LA RAZÓN las maniobras de la familia

Los hermanos Bardem en una manifestación
Los hermanos Bardem en una manifestaciónlarazon

Han transcurrido meses desde que LA RAZÓN destapara la estrategia que Mónica Bardem diseñó para cerrar La Bardemcilla. Y, si no hubiéramos hecho pública nuestra denuncia, los once trabajadores del restaurante se habrían ido a la calle sin cobrar su indemnización. La familia Bardem pretendía echarles sin haber cobrado el mes de abril trabajado y sin ver ni un sólo euro del dinero que les corresponde por Ley. Mientras escribo estas líneas, me viene a la cabeza la imagen de Javier Bardem con el cartel de «stop ERE» en mano, vestido de Armani y mirando desafiante a las cámaras en la entrada de la gala de los Goya. Por suerte, nueve de los once empleados dieron con Miguel Ángel Forteza Gil, un abogado laboralista que ha sabido actuar con agilidad. Tanto, que los Bardem se han visto obligados a rectificar. Eso sí, ninguno ha dado la cara, ni tan siquiera Mónica, gerente del negocio familiar. Sólo un frío y arrogante comunicado les informó de la rectificación y de la intención de pagar el máximo marcado por la Ley en estos casos.

Dura negociación

Los trabajadores han continuado dados de alta por parte de la empresa Mi Buenos Aires Querido a la espera de que se resolviera el segundo ERE planteado dentro del concurso de acreedores y de que el Juzgado de lo Mercantil nº 9 de Madrid aprobase el pago de la indemnización acordada después de unas duras negociaciones. ¿El acuerdo? 35 días por año trabajado y el sueldo del mes de abril, en que La Bardemcilla todavía abría para atender a sus clientes.

Manuel López de la Fuente es uno de los tres representantes de los trabajadores que se sentó para negociar: «Las buenas intenciones y la promesa de encontrar una solución con la máxima celeridad se quedaron en agua de borrajas», afirma. Y es que, continúa, al acudir a cobrar su nómina de marzo, «nos encontramos con que sólo nos pagaban la mitad. A algunos ni siquiera eso», añade el empleado, quien asegura que conserva fotocopiado el talón nominativo cobrado «para que no digan que somos unos mentirosos. Fueron ellos quienes empezaron con una gran mentira», sentencia.

El auto del 28 de mayo de 2013, perteneciente al Incidente Concursal Laboral 226/2013), confirmó las indemnizaciones, que rondan los 88.000 euros. Un paso con el que Javier Bardem cree resuelto el problema para comenzar a lavar su imagen pública y la de su familia. Después del tira y afloja entre la empresa y los empleados, éstos han cobrado más de lo propuesto por Mónica: «En un principio nos dijo que nos quedábamos en la calle, que no tenía dinero ni para pagarnos marzo, que no había un euro para las indemnizaciones y que acudiéramos a Fogasa a reclamarlas», explica, antes de añadir que «lo alucinante de esta familia es que Javier Bardem es capaz de darnos la espalda y gastarse en una semana tres veces más de lo que ha costado el ERE que ha resuelto el juez concursal... Los 88.000 euros que han pagado en indemnizaciones a sus trabajadores se lo gastan en cerrar una planta del hospital Cedars-Sinaí para que nadie moleste a su mujer Penélope Cruz y a su hijo», lamenta. Indignado con la situación, López de la Fuente se muestra rotundo: «Cuando sus hijos sean mayores verán que algo no cuadra. Ser ''hippie-pijo'' e ir de intelectual de izquierdas es incompatible», confiesa, mientras piensa que si se pueden permitir hacerse con una casa en la exclusiva urbanización La Finca, «también podían habernos pagado los 45 días por año y no han querido. Tienen alma de empresarios capitalistas en un cuerpo de progre con pegatina de "stop ERE". Los Bardem son una gran mentira y se ha visto».

Se abre la veda

Con el dinero en el bolsillo, los empleados han decidido saltarse la cláusula de confidencialidad que sobrevolaba sobre sus cabezas. Se abre la veda: «Tenemos mucho que contar, y no es una amenaza. Hay muchas ganas, porque desde aquí recuerdo a Mónica que una parte del sueldo nos llegaba por debajo. Lo cobrábamos en B fuera de la nómina», concluye.

En su día, los trabajadores se negaron a firmar documento alguno, bastó su palabra. Sin embargo, ese papel habría supuesto un bombazo. Con la polémica aún latente, está prevista la reapertura del local para finales de la semana que viene. No ha sufrido una gran remodelación. ¿Qué ha ocurrido con la ruina total del edificio que no permitía continuar con el negocio?, ¿dónde está la obra faraónica y la inversión millonaria que necesitaba? Éste era uno de los argumentos peregrinos que la empresa dio en abril a los once trabajadores. Sus nuevos dueños son empresarios del teatro que tienen alguna emblemática sala en la Gran Vía madrileña, entre sus negocios más fructíferos. Tan sólo han necesitado un mes y medio para lavar la cara al establecimiento así que quién sabe si alguno de los antiguos empleados volverá a cruzar el umbral del local con un contrato bajo el brazo.

88.000 EUROS

LA RAZÓN ha tenido acceso al documento del Juzgado de lo Mercantil nº9 de Madrid en el que figuran las indemnizaciones percibidas por los ex trabajadores de La Bardemcilla. En total, 11 afectados que se repartirán, en distintos montos, los casi 88.000 euros a los que asciende el pago. Una de las antiguas empleadas, Fernanda, será la que más cobrará: más de 19.000.

CRONOLOGÍA DE UN POLÉMICO ERE

23 de marzo

LA RAZÓN publica que los Bardem tienen intención de hacer un ERE a sus empleados acogiéndose a la nueva reforma laboral: pagarán 20 días por año trabajado. Mónica ya habría acordado la entrega de llaves a los nuevos propietarios.

26 de marzo

La familia publica un comunicado en el que admite su error y asegura que retirará el ERE. Según afirman, Mónica Bardem, al frente de la empresa, inició el proceso por consejo de su abogado; los dos hermanos se desmarcan.

6 de abril

Los trabajadores revelan en exclusiva al periódico que el ERE sigue abierto. Dos días después, los abogados de los Bardem envían un burofax a los empleados en el que les afean su conducta por haber hablado con este medio.

18 de abril

Las dos partes llegan a un acuerdo: se les pagarán 35 días por año trabajado. La familia tendrá que desembolsar unos 85.000 euros más. Las pagas extra no se abonarán, «ya que había sido prorrateadas», según el abogado.