Nueva York

Los belgas bendicen al príncipe y la periodista

Amadeo, archiduque de Austria, y Lili Rosboch, prometidos. Tras el anuncio del compromiso, las familias de la pareja celebraron el clásico acto de pedida de mano

El príncipe Amadeo junto a su prometida en un momento de la ceremonia de compromiso.
El príncipe Amadeo junto a su prometida en un momento de la ceremonia de compromiso.larazon

El príncipe Amadeo de Bélgica y la periodista italiana Lili Rosboch se han comprometido oficialmente en matrimonio. Se escapa otro «real» soltero de oro, de los pocos que quedaban. La Casa belga lo hizo oficial a través de un comunicado en el que anunciaban el enlace entre los jóvenes, que al parecer podrían celebrar la boda el próximo verano en Italia. Pero antes hay que cumplir varios actos protocolarios: el último ha sido la pedida de mano, que ha reunido a la familia real belga casi al completo. Celebrada en la residencia de los padres del novio –la princesa Astrid, hermana del rey Felipe, y su marido, el príncipe Lorenz–, el acto se desarrolló en un ambiente familiar íntimo en el que ha ocupado un lugar destacado el padrino de Amadeo, don Felipe, y su mujer la reina Matilde, así como los reyes Alberto II y Paola, que siguen ostentando el título de reyes a pesar de haber dejado el trono en manos de su hijo. Los invitados de la novia no poseen títulos reales, pero sí aristocráticos. La madre de Lili es la condesa Lilia Smecchia, quien asistió a la fiesta junto con su marido, el productor de cine italiano Nobile Ettore Rosboch.

Los padres de la feliz pareja anunciaron estar «encantados» con el compromiso, y no es para menos. Amadeo –el mayor de cinco hermanos– estudió en la Escuela de Economía y Ciencias Políticas de Londres y formó parte de una de las cuatro asesorías financieras más importantes del mundo. Por su parte Lili, tras licenciarse en literatura y cine en la capital británica, comenzó a trabajar en una conocida agencia de prensa, la «Bloomberg Muse». Además, habla perfectamente italiano, francés e inglés. Su noviazgo –que ya va por el quinto año– se dio a conocer en noviembre de 2013 por la revista «Point de vue». Pero la certeza llegó en enero, cuando la cadena de televisión belga VTM, en su programa «Royalty», mostró unas fotografías de la pareja participando en una gala de caridad organizada por la asociación «La Fondazione» en Nueva York. Precisamente allí, ambos tienen fijada su residencia.