Tras once años la Junta pagará a los prejubilados directamente

Sevilla- La Junta de Andalucía asumirá directamente, al margen de intermediarios, el pago de las pólizas de los ex trabajadores prejubilados de Santana Motor, unos mil; de los afectados de las empresas vinculadas a la aseguradora Apra Leven, unos 300; de Astilleros de Sevilla, 58, y de Boliden, 12. El consejero de Economía, Ciencia, Innovación y Empleo, Antonio Ávila, anunció ayer un acuerdo para desbloquear dichos pagos en una reunión mantenida en el Parlamento andaluz con los secretarios generales en Andalucía de la UGT, Manuel Pastrana, y de CC OO, Francisco Carbonero, en virtud de la Proposición no de Ley aprobada la semana pasada en la Cámara autonómica con el apoyo de todos los grupos instando a la Junta a resolver este asunto.
Para ello, el Consejo de Gobierno aprobará una norma que permita a la Junta pagar directamente y solventar las dificultades administrativas surgidas con las aseguradoras para el abono de las prejubilaciones de determinados colectivos de trabajadores con los que la Administración andaluza asumió compromisos.

Once años después de que entrara en vigor –en 2001– el convenio que inauguró el «fondo de reptiles» con la consiguiente aparición de comisionistas, intermediarios y primas a aseguradoras que se refinanciaban con frecuencia, el Ejecutivo andaluz ha encontrado una fórmula para acabar con toda esa trama, cuyos abusos investiga el juzgado de Instrucción 6 de Sevilla.
Ávila apuntó que en la tramitación de las pólizas han surgido dificultades administrativas muy complicadas de resolver y, por ello, la Junta ha optado por aprobar una norma específica para asumir el pago directamente sólo para esos colectivos. Este sistema se empleará únicamente con un grupo de prejubilados; el resto, la mayoría con pólizas en Generali Seguros, seguirán cobrando –con retraso en muchos de los casos– como hasta ahora. Las cantidades se abonarán con cargo a «recursos financieros que están en el presupuesto y con la liquidez que tiene la Junta se irán afrontando los pagos».

Tras la quiebra de la aseguradora belga Apra Leven, muchos prejubilados se quedaron sin cobrar –hasta 22 meses en algunos casos–. Ayer, se mostraban satisfechos pero cautelosos hasta que cuenten con el dinero.