La cecina leonesa de lidia se abre a nuevos mercados

León- La única cecina que se comercializa a partir del vacuno de lidia, que desde hace un año se puede adquirir en centros comerciales de León y Madrid, saldrá a la venta el mes que viene en mercados de Palencia y Logroño y se expandirá más adelante a Santander y Bilbao.
Así lo asegura el ganadero palentino Fernando Álvarez Sobrado, propietario de la dehesa que está ubicada más al noroeste de España y que es la única de ganado bravo que hay en la provincia de León. Concretamente, en el municipio de Santa María del Río, a veinte kilómetros de Sahagún.

Y pese a que la producción es pequeña, Álvarez señala que prevén incorporar nuevos clientes con más productos elaborados a partir de otras partes de las reses y que todavía están en pruebas, a la espera de que termine el periodo de curación y que dura un año. «Iremos probando poco a poco mientras vaya curando y desecharemos algunas partes del animal».

explica Álvarez, quien ha precisado que la iniciativa de la producción de cecina de lidia se puso en marcha hace dos años y que, tras el primer año de curación, salió al mercado en León por primera vez en toda España. Por el momento, el propietario de la finca cuenta en las bodegas con suficiente cecina, pero sin curar, por lo que hay que esperar para distribuir un producto en expansión, netamente leonés, que recomiendan dietéticos para seguir regímenes, y al que ha elevado al nivel del jamón de Guijuelo. Precisamente ha descartado por el momento comercializar en la provincia salmantina debido a que el jamón es un producto allí muy consolidado, aunque señala que una cecina buena, como la de lidia, puede competir perfectamente con el jamón del bueno. De hecho, la crianza del ganado de lidia es exactamente igual a la del cerdo ibérico, con el que comparte el hábitat de la dehesa y una alimentación natural.

Fernando Álvarez Sobrado: «La emoción ha desaparecido de las plazas de toros»
La cecina de vacuno de lidia procede de Valdellán, una finca de 500 hectáreas cuyos toros bravos debutaron en 2009 en Segovia y, desde entonces, han saltado varias veces a la arena en España y Francia. Su propietario ya tiene todo contratado para la temporada con catorce toros bravos. «Unas reses -dice-difíciles de torear con las que el profesional debe emplearse a fondo». Álvarez lamenta que la emoción ha desaparecido de las plazas por la existencia de un toro más comercial y manejable y que ha ahuyentado a los aficionados.