Teherán se ceba con Israel

JERUSALÉN- Las explosiones registradas ayer en Bangkok, Tailandia, confirmaron explícitamente lo que en Jerusalén ya daban como hecho: detrás de la ola de atentados e intentos frustrados de ataque contra blancos israelíes está la República Islámica de Irán.
Ayer, poco después de que cinco civiles tailandeses resultaran heridos en Bangkok, el ministro de Defensa de Israel Ehud Barak –de visita en Singapur– lo dijo abiertamente: «Irán y Hizbulá son elementos terroristas incansables que constituyen un peligro para la estabilidad de la región y el mundo». Pero quizá, esta vez lo más significativo sea que fuentes en los servicios de seguridad de Tailandia afirmaron que los blancos buscados eran israelíes y que todos los detenidos son ciudadanos iraníes. La primera explosión de la jornada se registró en un departamento que agentes iraníes habían alquilado y convertido de hecho en un laboratorio de explosivos. Allí fue detenido luego un hombre y se hallaron pasaportes iraníes.
Uno de los agentes lanzó una carga explosiva sobre un taxi que rehusó llevarlo y el estallido atrajo a la Policía. El terrorista vio a los efectivos del orden en camino al lugar y se aprestó a lanzar explosivos sobre ellos, pero éstos le estallaron antes de tiempo y el hombre perdió una pierna. Dos iraníes sospechosos fueron detenidos por la policía de Bangkok. Uno de ellos es el hospitalizado herido y el otro fue identificado como Muhamad Hazai cuando intentaba salir del país desde el aeropuerto camino a Malasia.
Si bien las explosiones de ayer no fueron en zonas de embajadas extranjeras de Bangkok, se estima que por diferentes fallos los iraníes no llegaron a sus objetivos deseados. El ministro de Defensa iraní Wahidi declaró ayer que «la nueva estrategia es vengar acción por acción» y que «los ataques los cometen pueblos que son víctimas del sionismo». La interpretación que cabe dar a ello es, ante todo, que ya no hay un desmentido iraní terminante como el transmitido el lunes tras los ataques contra blancos israelíes en Nueva Delhi y Tibilisi(Georgia), sobre el rol de Irán al respecto.Y, además, se da a entender que Irán vuelve a acusar a Israel de la muerte y desaparición de varios científicos nucleares.
Desde Beirut, un diputado de la organización chiíta pro iraní Hizbulá, aclaró ayer los ataques de estos días no eran la venganza por la muerte hace cuatro años de su jefe de operaciones de Imad Mughniyeh. «Esa venganza llegará, y será de otra envergadura», aclaró.