Gordillo finaliza su algarada con el anuncio de «sorpresas»

La «aventura» sindicalista liderada por Sánchez Gordillo, concluyó ayer con la llegada a Sevilla de cientos de jornaleros, tras un mes de marcha obrera que se inició en Málaga.
El líder del Sindicato Andaluz de Trabajadores (SAT) comandó desde el 7 de agosto la protesta por varias localidades andaluzas en las que prometió que se producirían «sorpresas», que se saldaron finalmente con asaltos a varios supermercados, la ocupación de fincas y sucursales bancarias, protestas, sentadas frente a comercios y varias detenciones.
El portavoz del SAT, Diego Cañamero, se mostró exultante ante lo que consideró «un éxito por encima de todas las previsiones» logrando que la sociedad «descubra la crisis como una estafa y una mentira que sirve para aprobar recortes».
Al mismo tiempo, un centenar de personas, entre los que había una decena de miembros del SAT, se reunieron en un Mercadona del distrito madrileño de Vallecas para defender a los jornaleros que fueron imputados por el asalto de los supermercados en Écija y Dos Hermanas. En esta concentración, un grupo de jóvenes de la plataforma Justicia y Libertad que pretendían evitar un nuevo expolio de alimentos por parte de los jornaleros, fueron increpado por jóvenes de extrema izquierda que se encontraban en la concentración apoyando a los miembros del sindicato imputados. Además, los allí congregados expresaron su apoyo «incondicional» a todos aquellos que roben productos del citado supermercado «por la situación de crisis que viven muchas familias».