Más seguridad para la catedral que no desvelará la ubicación del códice

El deán de la Catedral de Santiago de Compostela, José María Díaz, reconoció que «ya hay cámaras internas. Colocaremos el Códice donde nos recomiende la Policía científica. Pero no vamos a especificar el lugar. Estará en la catedral y en el ámbito del archivo». Él mismo confirmó que el sospechoso se había llevado de su despacho artículos y cartas, alguna bandeja de plata sin valor –una persona, que no ha querido ser identificada, comentaba a este diario que conoce el caso de una vecina de la ciudad que encargó un trabajo a Manuel F. C. y que luego notó la ausencia de algún objeto–. A diferencia de la Policía, el deán descarta la venganza como móvil y apuesta por «la codicia». Y reiteró que el acusado «es un hombre externamente piadoso, pero que es probable que padezca doble personalidad». Desde que se produjo la sustracción del Codex, la catedral ha implementado el programa de seguridad, que cada año se mejoraba. Pero, como informa una persona de la catedral, sin embargo, se habían retirado las subvenciones para apoyar este aspecto. Ahora parece que existe, desde la instituciones públicas, una predisposición para colaborar. Este nuevo programa de seguridad, además de incluir nuevas cámaras, conlleva una unificación de las llaves de acceso que impide las copias y un cierre que imposibilita abrir las cámaras pertinentes, salvo a las permitidas. Ahora una de las preocupaciones es cómo mantener en las mejores condiciones este volumen del siglo XII. Se ha advertido, por el momento, que, en caso de que se exponga, habrá que consensuar con expertos la temperatura, las condiciones de luminosidad y de humedad para preservar este documento. El presidente de Gobierno, Mariano Rajoy, asistirá mañana a la entrega del Códice en la Catedral. Pero lo que todavía está por fijar es el lugar donde se exhibirá al público. Se ha hablado hasta del Palacio de Gelmírez, pero parece que será en el interior de la seo. Se baraja la sala capitular o de otra adyacente.