Hereu asegura que la ciudad se salvará si se convierte en el«epicentro» progresista de Europa

Así de tajante se mostró el alcalde de Barcelona, Jordi Hereu, en la jornada de debate que la federación socialista había organizado en el CCCB con el nombre «Barcelona es capital, ideas para seguir avanzando».

El edil dedicó poco tiempo a avivar más el debate de las primarias. Le concedió un par de citas –«será un proceso que respetará cualquier opción» y «hay ganas de sumar y salir fortalecidos, con los riesgos y oportunidades que conlleva»– para dedicar todo su discurso a una auténtica declaración de intenciones sobre el futuro de la Barcelona socialista.

Consciente del riesgo que se presenta en mayo tras el resultado de las autonómicas, – «necesitamos mucha autoexigencia, hay mucho trabajo por delante–, Hereu dedicó su tiempo a destacar que las municipales del próximo del 22 de mayo representan una oportunidad para que «los progresistas busquen caminos» ante una socialdemocracia que vive un momento de «incerteza e incredulidad». Para conseguirlo, el edil apuesta por convertir a la ciudad en la capital del sur de Europa, llevarla a ser el «epicentro» de todo el movimiento progresista.

La creatividad como arma
Asumiendo el desencanto de del electorado, apostó por luchar contra la «indiferencia» aportando la mejor arma de la ciudad, «la creatividad».

«Hemos de sentirnos orgullosos de aquello que hemos hecho, porque lo bueno supera de largo a donde nos hayamos podido equivocar», apuntando, posiblemente a batacazos como la consulta de la Diagonal.

«La creatividad salvará a Europa», vaticinó un Hereu que se ve plenamente capaz de «construir la Barcelona que queremos seguir liderando».