Y la ministra asume las consecuencias de su apuesta

La ministra de Sanidad defendió que presentarse a las primarias para ser candidata a la Comunidad de Madrid es su responsabilidad y no la del presidente del Gobierno, más allá de los elogios que éste haya podido hacerle. En declaraciones a la Cadena Ser recogidas por Ep, Jiménez reconoció su «satisfacción» por el hecho de que Zapatero haya hecho un reconocimiento expreso a su labor. «No voy a rechazar ese apoyo expreso, pero ahora tengo que apoyarme en el voto de los militantes», enfatizó, consciente de que debe ganarse aún el favor del PSM.

La titular de Sanidad quiso dejar claro que se presenta de forma «libre» y no bajo una «imposición» de Zapatero. «Cualquiera que le conozca sabe que jamás hace una imposición, ni siquiera pide nada. Es evidente –reconoció Jiménez– que he hablado con él en muchas ocasiones, también estos días, pero la decisión la he tomado de forma libre e individual».

Además, rechazó, al igual que su rival, que las primarias supongan un enfrentamiento entre la Ejecutiva federal del PSOE y la regional porque los militantes, dijo, tienen «suficiente madurez democrática» y criterio para elegir «con rigor». Eso sí, auguró que quien salga finalmente elegido estará «enormemente fortalecido» para luchar por ganar las elecciones en Madrid.

La ministra afirmó que se presenta «con mentalidad ganadora» y segura de sus posibilidades. «Yo no estoy aquí para ganar a Tomás Gómez –dijo en un alarde de optimismo– sino para ganar la Comunidad de Madrid». No obstante, Jiménez no quiso aventurar si contaría con Gómez en caso de resultar ganadora o si estaría dispuesta a ser su número dos en caso contrario.