Francia

El ex director de la Policía alega que se le avisó tarde para no declarar por el chivatazo a ETA

El ex director general de la Policía, Víctor García Hidalgo, principal imputado en la causa en la que se investiga el supuesto chivatazo a ETA en el bar Faisán de Irún (Guipúzcoa) debía comparecer hoy antes el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón para aclarar si uno de los números de teléfono que llevaba el presunto etarra Jon Yurrebaso cuando fue detenido era suyo, informaron ayer fuentes jurídicas. Sin embrago, García Hidalgo se ha negado a comparecer alegando que la notificación le ha llegado tarde y que por encontrarse fuera le resultaba imposible presentarse. Garzón, que investiga estos hechos en una pieza separada a la del chivatazo, trata de averiguar si este número era utilizado habitualmente por el máximo responsable del Cuerpo Nacional de Policía y, en ese caso, por qué fue esgrimido por Yurrebaso y Suárez cuando fueron detenidos por la policía francesa. El ex director general de la Policía asistirá al interrogatorio, que se celebrará a partir de las 12.00 horas del mediodía, como imputado por un delito de colaboración con organización terrorista y revelación de secretos, por lo que podrá asistir acompañado de un abogado, según explicaron las citadas fuentes. Yurrebaso fue arrestado en la localidad francesa de Périgueux el 29 de marzo de 2007, en pleno alto el fuego de ETA, junto a Kepa Mirena Suárez. Los presuntos terroristas se presentaron como "mensajeros"de la banda terrorista en el denominado 'proceso de paz' con el Gobierno y tenían un papel en el que figuraban varios números de teléfono, entre los que se encontraba uno (648147190) que se atribuye al ex director general de Policía. La Sección Tercera de la Sala de lo Penal admitió la semana pasada la personación de la asociación Dignidad y Justicia (DyJ) en este procedimiento en un auto en el que corregía a Garzón por haber rechazado una querella presentada por este colectivo en relación con estos hechos. Las diligencias instruidas por Garzón, que se encuentran secretas, no se dirigen en todo caso contra Yurrebaso y Suárez ya que, tal y como argumentó la Fiscalía, el delito de colaboración que se les imputa es "incompatible"con el de integración en organización terrorista, "por el cual están siendo investigados en territorio francés".LA FISCALIA, CONTRA LA IMPUTACION DE HIDALGO Tal y como recoge el auto de la Sección Tercera, el Ministerio Fiscal rechazó la imputación de García Hidalgo en esta causa al defender que "carecía de responsabilidad alguna en el Ministerio del Interior"cuando los etarras fueron detenidos, ya que su cese se produjo en septiembre de 2006 y los etarras fueron detenidos en marzo de 2007. De ello se infiere, según el departamento dirigido por Javier Zaragoza, "no una vinculación entre el ex director y los terroristas, sino una relación entre dicho teléfono y los miembros de ETA". Sin embargo, el tribunal, integrado por los magistrados Alfonso Guevara (presidente), Guillermo Ruiz Polanco (ponente) y Angeles Barreiro, rechaza este argumento al indicar que el cese de García Hidalgo "no excluye susceptibilidad de valoración de sus actos realizados precedentemente en su condición pública, si se ejecutaron en tal condición". La Sala, que interpreta la posición de la Fiscalía como un "eufemismo", un "sofisma"o una "peculiar hermenéutica", sostiene que, "prescindiendo de las imputaciones a Yurrebaso y Suárez, lo pretendido por la recurrente es el esclarecimiento de la intervención o no del Sr. García Hidalgo en los hechos investigados y, de haber intervenido, en qué calidad lo hizo". Además, el tribunal rectifica el auto dictado por el instructor y sostiene que "no es cierto"que los hechos en los que pretende apoyarse la querella "ocurrieron en tiempo anterior a la fecha de detención", por lo que, según el argumento esgrimido por Garzón, no guardarían "ninguna relación con los mismos".INVESTIGACION ABIERTA EN 2007 La causa sobre el papel de Yurrebaso fue abierta en julio de 2007 por el juez Juan del Olmo, que cursó dos comisiones rogatorias a Francia para solicitar información sobre "determinada documentación en la que constaban anotados algunos números de líneas telefónicas pertenecientes a altos funcionarios de los Gobiernos español y francés intervinientes en el proceso de negociación o interlocución con ETA". Posteriormente, se inhibió en favor de Garzón, que venía "conociendo con anterioridad"estos hechos. En la causa principal sobre el chivatazo están imputados García Hidalgo, al jefe superior de Policía del País Vasco y a un inspector de la Brigada de Información de Alava por la delación que habría frustrado una operación policial contra el aparato de extorsión de ETA que tuvo lugar en el bar 'Faisán' de Irún el 4 de mayo de 2006.