Vueling se postula como la primera aerolínea de El Prat

Barcelona- «Barcelona es la casa de Vueling y nuestra obligación es protegerla». Con seguridad y contundencia, el consejero delegado de la compañía aérea, Alex Cruz, reafirmó ayer el compromiso de Vueling por seguir trabajando para que el aeropuerto de El Prat se convierta en un «hub». Tras la desaparición de Spanair y, con ello, el fin del sueño nacionalista de contar con una aerolínea propia que situara a Cataluña en el mundo, Cruz, que lamentó lo sucedido, presentó nuevas rutas y frecuencias. Un deseo que resultó creíble para los inversores, ya que la cotización en bolsa de Vueling se disparó un 25 por ciento.

Hace escasamente tres semanas, la aerolínea presentó 23 nuevas rutas y la incorporación de cinco aviones a su flota. A esta nueva oferta, y ante el hueco dejado por Spanair, Vueling anunció ayer 33 nuevas frecuencias de vuelos ya programados para la campaña de verano y dos nuevas rutas desde Barcelona a Berlín y a Hamburgo. Además, desde el aeropuerto de Bilbao se ofrecerán tres nuevos destinos: Tenerife, Las Palmas y Lanzarote.

«No hay ninguna aerolínea en El Prat que haya incrementado tantos vuelos como Vueling; es la que más ha contribuido a su futuro», apuntó Cruz. Y es que, poco a poco, la aerolínea ha logrado fidelizar tanto a sus clientes como a compañías internacionales, con su apuesta por la conectividad y la oferta de servicios de calidad. En este sentido, «esperamos que Vueling se convierta en la primera línea de El Prat» con el reconocimiento y apoyo subsiguientes de la Generalitat de Cataluña y de las instituciones.

«Vamos a crecer; el proceso está abierto», aseguró Cruz. De momento, la empresa ya ha contactado con diez empresas de «leasing» para concretar la disponibilidad de aviones y «dará prioridad en la contratación de personal a los trabajadores de Spanair». Aunque, eso sí, «no vamos a permitir que Barcelona se convierta en un aeropuerto de "low cost"», dijo Cruz. Por su parte, Ryanair instó a Aena a rebajar las tasas y pidió que «aprendan la lección de Spanair». La aerolínea irlandesa también estudia potenciar su presencia en El Prat.