Barcelona

Sharp plantea un nuevo ERE temporal para toda la plantilla en Sant Cugat

La compañía de electrónica de consumo Sharp ha planteado un nuevo ERE temporal de seis meses para toda la plantilla de su fábrica de Sant Cugat del Valls (Barcelona), en la que trabajan unas 320 personas, han informado a Europa Press fuentes sindicales.

La dirección de la planta de televisores ya anunció en febrero de 2010 un ERE temporal que termina el próximo 13 de abril, y que afecta a 280 de los 330 trabajadores de la fábrica, pero la falta de carga de trabajo ha llevado a la multinacional a preparar uno nuevo, que los sindicatos prevén que empiece al finalizar el que aún está vigente.

Este expediente será el tercero que la empresa presenta desde septiembre de 2009, cuando planteó el primero, de seis meses, que se encadenó --con un mes de diferencia-- con el segundo de un año, desde abril de 2010 a abril de 2011.

Agotan la prestación de paro

En declaraciones a Europa Press, el presidente del comité de empresa, Eduard Pomar, ha explicado que los trabajadores están "preocupados"porque el encadenamiento de expedientes temporales hace que la plantilla lleve un año y medio bajo regulación de empleo temporal, y el nuevo ERE empeorará la situación de los trabajadores que ya han superado los 180 días que se computan para el 'contador cero' de los ERE temporales, y que, por tanto, ya han consumido buena parte de su subsidio de paro.

La fábrica de Sant Cugat estuvo parada durante tres semanas a principios del mes pasado a causa de un ajuste de la producción, y desde el 21 de febrero está trabajando solo una línea de producción de las tres totales.

Hace un mes, Sharp garantizó la continuidad de la fábrica de Sant Cugat, aunque no detalló si se producirá una reestructuración de la actividad o si se deberá reducir la plantilla. La dirección española de Sharp presentó a la cúpula nipona a principios de año el presupuesto para el ejercicio 2011 --que según el calendario japonés empieza en abril--, pero no fue aceptado, por lo que los directivos deben negociar una segunda versión.

Según la compañía, las pérdidas a cierre del presente ejercicio --que finaliza en marzo-- se situarán en torno a los 11 millones de euros, a causa de la fuerte caída de ventas.