Medvedev «corta» la cabeza al ministro de Hacienda

El ministro de Finanzas de Rusia, Alexei Kudrin, presentó ayer formalmente su dimisión. Considerado el «padre y guardián» de la estabilidad económica de la superpotencia, Kudrin osó criticar la «diarquía» Putin-Medvedev al asegurar que no aceptaría formar parte del próximo Gobierno».

La reacción del actual presidente ruso y futuro primer ministro fue fulminante. Kudrin, de viaje en Estados Unidos durante el fin de semana, había dicho textualmente: «No me veo en el nuevo Gobierno. Por otro lado, nadie me ha propuesto nada ni creo que mis divergencias me permitan formar parte del Gabinete».

A su regreso a Moscú, puesto cara a cara con Medvedev, recibió la desabrida respuesta: «Dicha declaración realizada en Estados Unidos es indecente y no puede ser de ninguna manera justificada. Nadie ha revocado la disciplina y la subordinación en el Gobierno. Usted debe decidirse muy rápido y darme hoy mismo [por ayer] una respuesta».

Kudrin no se amilanó: «Dimitri Anatolevich [Medvedev], efectivamente nosotros tenemos diferencias, pero yo tomaré una decisión al respecto sólo tras consultar con el primer ministro», Vladimir Putin.

Entonces, Medvedev le espetó: «Usted puede consultar con quien desee, incluso con el primer ministro, pero por ahora yo soy el presidente y tales decisiones las tomo yo».

No ha trascendido si Kudrin consultó su caso con Putin, pero de haberlo hecho no le habría servido de nada. Cuatro horas después de su conversación con el presidente, en la que hubo varios testigos, el jefe de Gabinete anunciaba la dimisión del ministro de Finanzas, rápidamente aceptada por el Kremlin.

 Kudrin se había mostrado muy crítico con la decisión del Gobierno ruso de asignar ingentes fondos al rearme de las Fuerzas Armadas durante los próximos diez años, aduciendo que esto pondría en peligro la estabilidad del presupuesto y las políticas sociales.
Nacido en 1960 en la actual Letonia, Kudrin era ministro de Finanzas desde mayo de 2000.