Piden 9 años para una dependienta que dejó sorda a una clienta a la que pegó

La fiscal reclama además para la procesada, a la que acusa de un delito de lesiones, que indemnice a la víctima con 68.637 euros por las lesiones y secuelas sufridas, cantidad de la que, según pide, deberá responder la mercantil responsable del comercio, ya que los hechos sucedieron dentro del horario laboral de la denunciada.

En el juicio celebrado hoy en la Sección Segunda de la Audiencia de Valencia, la denunciante, de 22 años y sorda un 70 % del oído derecho y un 50 % del otro, ha declarado que la procesada le ha "destrozado la vida", ya que la sordera le impide "ir al cine y a la piscina, conducir y oír el teléfono"o a su hijo de 2 años cuando llora.

La dependienta, de 27 años, ha reconocido que protagonizó "un incidente"con la víctima durante el que "ambas"se zarandearon, pero ha negado haberla pegado.

Según la fiscal, el 17 de diciembre de 2006, Noelia C.G, dependienta de una conocida tienda de ropa ubicada en el centro comercial El Saler de Valencia, abordó "sin mediar palabra"a la víctima, que se encontraba con una amiga "desordenando unas prendas que los empleados acababan de colocar"antes de cerrar el comercio.

Cuando la chica, de 17 años por entonces, trató de salir del local, la acusada la interceptó y comenzó a propinarle "patadas y puñetazos", golpeándole "especialmente los oídos", cara, mandíbula y abdomen, aún cuando cayó al suelo.

Debido a la agresión, la joven sufrió diferentes lesiones por las que recibió asistencia médica.
Posteriormente se le diagnosticó un síndrome de vértigo con hipoacusia, náuseas y vómitos que los médicos relacionaron con un golpe directo -patada o caída- sobre la región temporal.

Finalmente se detectó la rotura del peñasco auditivo de la paciente, que precisó 532 días de tratamiento médico, ha sido sometida a tres operaciones y sufre una hipoacusia irreversible del 70 % en el oído derecho y del 50 % en el izquierdo.

En la vista, la joven que se encontraba con la víctima ha testificado que estaban "mirando ropa para un regalo"cuando la acusada golpeó a su amiga, "no sólo la zarandeó", y ha insinuado que la agresión podría estar relacionada con "un exnovio".

El encargado de la tienda ha dicho que denunciante y amiga estaban "desordenando el género"cuando el comercio estaba ya con la persiana metálica bajada, y que tanto denunciante como denunciada "forcejearon".

En su turno, los peritos han defendido versiones diferentes sobre las causas de la sordera de la víctima: unos han sostenido que el único factor desencadenante de ésta es una "fractura muy peculiar"del peñasco auditivo "típica de un golpe", mientras que otros la han atribuido a "patologías previas de la chica", entre las que han citado "otitis agudas, paladar ojival y vegetaciones".

Estos últimos, además, han asegurado que, de estar causada por la agresión, la hipoacusia habría aparecido "inmediatamente y no a posteriori como sucedió", y que, de ser de origen traumático, "no empeoraría, como está pasando"