«He sido elegido por miles de dedazos»

Y con la primera respuesta, sin necesidad de que nadie se lo escribiera, llegó el primer titular: «Ni dedazos ni conspiraciones». Al todopoderoso vicepresidente del Gobierno y más que seguro candidato del PSOE le molesta profundamente que haya quien diga que ha sido elegido por el «dedazo» de Zapatero. Pero lo que le deja más perplejo es que los mismos que pretenden descalificar su candidatura por el procedimiento de elección hablen además de conspiración contra el mismo Zapatero. O lo uno o lo otro. Él sostiene que ha sido elegido por el «dedazo de miles de militantes» y el «dedazo» también de los 300 miembros que componen el Comité Federal que avaló el sábado por unanimidad su candidatura.

A Rubalcaba no le gustan los dimes y diretes, ni los que se esconden en el anonimato para traer y llevar chismes, mucho menos «los que invocan el nombre de Dios en vano» (se refería a Zapatero). Así que evitó entrar en si Chacón pretendió negociar su retirada, en cuándo Zapatero le propuso ser candidato o en otros detalles de la crisis que los socialistas vivieron la semana pasada tras el hundimiento del 22-M. Tan sólo desveló que tomó la decisión de presentarse a las primarias durante la campaña, entre los mítines que dio en Granada y Vigo. Porque sus conversaciones y confidencias con Zapatero trascienden, a su juicio, lo profesional y él cree que no tiene por qué contarlas.

Lo que sí descubrió es que el domingo habló largo y tendido con Chacón, que la ministra le dijo estar a su disposición, que no se ha sentido aludido cuando estos días se ha hablado de una presunta conspiración para apartar a su adversaria de la carrera y que, a diferencia de quienes pretenden usar su experiencia con un baldón, él cree que es un valor. Luego, aseguró que su proyecto tendrá continuidad con lo hecho por Zapatero, pero que introducirá cambios. Los detalles los pospuso para la conferencia política que el PSOE celebrará en septiembre. Pero avanzó: «Creo saber lo que España necesita para los próximos años y tengo una confianza ciega en el país para alcanzarlo». Sobre si seguirá o no en el Gobierno dejó abierta la puerta a una salida, pero no inmediata. De momento, no ve incompatibilidad alguna, pero si la viera, dejaría el Ejecutivo. Todo esto en 45 minutos de rueda de prensa.

«Agua pasada no mueve molinos»
Con esta frase evitó ayer Carme Chacón, en la Feria del Libro de Madrid, polemizar con las declaraciones de José Blanco acerca de si se tejió alguna maniobra o no en el PSOE contra Zapatero. La responsable de Defensa no quiso responder a ninguna pregunta sobre el asunto y alegó que «ya dije lo que tenía que decir».

Y ya van tres «rivales»
Davides ante Goliat serán los adversarios de Rubalcaba en las primarias si consiguen el aval de un 10% de los militantes del PSOE. Sus nombres: Luis Ángel Hierro, ex diputado socialista del Congreso y profesor de la Universidad de Sevilla; José Carlos Carmona, también docente de la misma universidad y militante desde 1982, y Julián Pastor, militante de la agrupación de Móstoles. «Este partido no debe ungir a nadie», dice Pastor (Extremadura, 1958), que ha formado parte del Comité Regional madrileño y pasó por el ministerio de Vivienda en la etapa de María Antonia Trujillo.

«Con todo el respeto a Rubalcaba, se debe elegir democráticamente a todos sus candidatos. Chacón no debería haber renunciado a la candidatura». Va a por todas. «Después del 22-M, ha llegado el momento. Y sé que puedo entrar en el proceso. Antes de las elecciones ya hablé con algunos compañeros, y me apoyan». ¿Cuál será su estrategia? «Reunificaré al partido, hay mucha desilusión. Mi programa se basa en la protección social de los ciudadanos. Todos debemos ser iguales». Mensaje que tiene presente en las primarias. «Pelearé hasta el final».