Turquía

Güiza intenta huir de Turquía

Dani Güiza ya está harto de Turquía. El jugador jerezano quiere volver como sea a España y está negociando con el Hércules, con quien ya ha llegado a un acuerdo para firmar por dos campañas, a razón de dos millones de euros por cada una de ellas. El club alicantino le ofrece al Fenerbahçe cuatro millones en concepto de traspaso, pero se ha cruzado en la operación el Rubin Kazan ruso, que duplica la oferta a los turcos y que también ofrece más dinero al delantero.

Güiza intenta huir de Turquía
Güiza intenta huir de Turquíalarazon

Sin embargo, el singular futbolista no quiere ni oír hablar de marcharse a Rusia y ya ha hecho saber a los dirigentes otomanos que no cuenten con él para irse a otro país que no sea España. Hoy cumple 30 años y espera el regalo de que le dejen marchar al fútbol que mejor le va a sus especiales características para proseguir su carrera, a la que le quedan, en su opinión, «cinco años al máximo nivel».


Güiza atendía ayer la llamada de LA RAZÓN y reconocía que se encuentra en una situación delicada porque está su futuro en juego. «Hace dos días les dije a los del Fenerbahçe que no pienso irme a Rusia. La oferta de los rusos es mejor que la del Hércules, pero tendrán que pensar si es mejor tener los cuatro millones que ofrece el Hércules o quedarse sin nada porque ya me han dicho que no cuentan conmigo. Sería muy duro para todos tenerme dos años en la grada, teniendo que pagarme. Lo mejor es llegar a un acuerdo».


El jerezano es optimista y, con su particular forma de expresarse y de entender la vida, tiene fe en que muy pronto estará por tierras alicantinas: «Yo siempre soy optimista en la vida y así me han ido bien las cosas. Espero que si todos ponemos de nuestra parte lo podamos arreglar. Mi etapa en Turquía se ha terminado. Aquí las cosas no me han salido como yo esperaba. Nunca me he terminado de adaptar y es un club muy duro con los futbolistas. No puedo decir que haya sido feliz».


Lo que anhela el delantero internacional es volver a sentirse a gusto jugando al fútbol y cambiar de vida. En Estambul dice que no puede estar tranquilo, en parte por la Prensa. «La Prensa deportiva es tremenda. En el momento en el que salgo de casa a tomarme una coca-cola o una cerveza tengo a 50 periodistas encima y eso ha hecho que no pueda ni salir de mi casa. En España será diferente. Me gusta mucho más el estilo de juego que hay en la Liga de España, hay más nivel en el campeonato y más emoción. Quiero volver a disfrutar de eso».


Pero también es consciente de que hace tiempo de que se convir- tió en carne de cañón para la prensa rosa, la que indaga sin pu- dor alguno en sus relaciones y en todo lo que no tiene nada que ver con su profesión. Pero ni eso le quita las ganas de volver a España: «Yo paso de la prensa del corazón. No les doy ningún juego. Yo me voy a dedicar a jugar al fútbol, a hacer las cosas bien y a intentar que el Hércules termine entre los diez primeros».


En sus planes está contraer matrimonio con su novia, que es de Sanlúcar de Barrameda. «Dentro de poco seré un sanluqueño más», dice entre risas. Precisamente fue en tierras gaditanas donde vio por televisión cómo la Selección española, en la que militaba no hace mucho, ganaba el Mundial de Suráfrica. Pero, lejos de sentir un sabor agridulce, lo disfrutó como el que más. «Para mí no tuvo nada de negativo ver cómo España ganaba porque es muy grande lo que hemos conseguido. Me habría gustado estar allí, claro, pero ya tu- ve la suerte de ganar la Eurocopa, que también es algo muy grande».

El sueño de volver a la selección

Güiza desconoce por qué Del Bosque dejó de convocarlo, pero no quiere polémicas. «Cuando me llevaba no le preguntaba el motivo y ahora tampoco voy a preguntar por qué no me lleva. Siempre que jugué con la Selección di el máximo y fui un buen profesional». Considera que tendrá más opciones de volver si regresa a España, porque «Turquía no es Inglaterra y no están tan pendientes de ese campeonato. Sé que va a ser muy complicado porque hemos ganado un Mundial y hay un gran bloque, pero si me dejan irme al Hércules y me salen bien las cosas, tendré mi oportunidad».