De Guindos ofrece austeridad en su estreno europeo

BRUSELAS- Al ministro de Economía y Competitividad, Luis de Guindos, le tocó ayer ejercer de nuevo de guardián del compromiso firme con el cumplimento de déficit, y corregir el mensaje ambiguo que había lanzado su compañero en Hacienda, el ministro Cristóbal Montoro, durante el fin de semana. «No está en estos momentos en la agenda» pedir un retraso de al menos un año del objetivo del cumplimiento de déficit, dijo De Guindos a su llegada ayer a su primer encuentro con los ministros de Finanzas del Eurogrupo.
A pesar del esfuerzo hercúleo que tendrá que hacer el Gobierno de Mariano Rajoy, que este año tendrá que rebajar el agujero público en casi cuatro puntos del PIB hasta el 4,4%, De Guindos llevó «el compromiso del Gobierno de España, un compromiso absolutamente ineludible con la austeridad presupuestaria, y es un compromiso muy superior al que tenían las anteriores administraciones españolas, como se ha puesto de manifiesto por la desviación que tuvimos del déficit público», comentó a su llegada.
El ministro no quiso entrar a valorar las supuestas llamadas a la flexibilidad de Montoro, que también fueron lanzadas en el pasado por el primer ministro italiano, Mario Monti. El italiano sugirió que se debería tener en cuenta que la UE entrará en recesión este año, y no presentará las cifras de crecimiento que se esperaban cuando se realizaron los pronósticos iniciales, para reajustar el calendario y los objetivos de reducción de déficit, con el fin de que los ajustes no asfixien el crecimiento.
De Guindos recordó que el compromiso con la disciplina fiscal «se complementa con otro planteamiento adicional, que son las reformas económicas y el crecimiento económico», los dos pilares con los que España y la UE esperan recuperar la confianza de inversores y ciudadanos.