Literatura

Cataluña

Una gran novela de novelas

Jaume Cabré regresa a la narrativa tras ocho años con «Jo confesso», obra de más de mil páginas en las que repasa 600 años de historia de Europa

El escritor Jaume Cabre, junto a la portada de su nueva y pantagruélica novela «Jo confesso» (Proa), durante la presentación del libro ayer en el Ateneu Barcelonés
El escritor Jaume Cabre, junto a la portada de su nueva y pantagruélica novela «Jo confesso» (Proa), durante la presentación del libro ayer en el Ateneu Barcelonéslarazon

BARCELONA- Una novela de más de mil páginas no puede resumirse en una frase, pero tampoco hace falta. Sólo hay que empezar por la primera y seguir una tras otra. Jaume Cabré es uno de esos escritores que consigue que siempre quieras pasar a la siguiente y siguiente y siguiente y así no importa que tenga mil o 10.000 páginas. Su nueva novela, «Jo confesso» (Proa), es la prueba definitiva de esto, una apasionante y brutal «tour de force» que, a través de la confesión del torturado Adrià Ardèvol, lleva al lector sin a penas darse cuenta a través de 600 años de historia europea. «Yo sé que el lector es inteligente y curioso. Ésta es la base para atraerlo hacia la página siguiente», aseguró ayer el escritor.
Después del éxito internacional de «Les veus del Pamano», Cabré ha apostado por una novela de novelas, compleja, ambiciosa, de múltiples ecos temáticos y estilísticos, y que lo confirma como uno de los grandes autores europeos de la actualidad. «Para mí escribir no es ningún sacrificio. Me gusta crear personajes, provocar emociones y quería escribir una vida con todas sus repercusiones», señaló el novelista.

Un personaje para el recuerdo
La vida que escruta hasta el milímetro es la de Adrià Ardèvol, desde su nacimiento, a finales de los años cuarenta, hasta su vejez, lleno de fantasmas y un sentimiento de culpa que le mantiene atenazado. Niño superdotado, con una inquebrantable voluntad de saber, que suple la soledad y la indiferencia de sus padres con ese sueño que el saber sí ocupa lugar, el lugar de los afectos perdidos o negados. «Quería escribir todo lo que se puede escribir de una vida. El oficio del novelista es ponerse en la piel de quien sea, de un niño, de un anciano, de una mujer y a partir de allí ayudarlo a avanzar. Yo no pienso de antemano en la historia que quiero contar, son los personajes que me llevan a diferentes sitios», afirmó el autor de «Les veus del Pamano».
A partir de Adrià, y su extraña relación con diferentes objetos fetiche, el escritor crea una novela de novelas con múltiples historias que se entrecruzan y nos hacen viajar a través de 600 años de historia de Europa, o lo que es lo mismo, 600 años de historia de la maldad. «El siglo XX no tiene el patrimonio de la crueldad, es uno de los ejes de la historia de occidente. Me interesaba preguntarme por esa condición del mal gratuito, de la incapacidad de empatía por el sufrimiento ajeno y sus repercusiones a través del tiempo, cómo marcan el presente», dijo el escritor.
Otro de los temas centrales de la novela es el sentimiento de culpa y cómo puede llegar a paralizarnos y conformar nuestro ser. ¿Hay redención posible? ¿Nuestros actos pueden ser por completo impunes? Cabré no busca dar respuestas, pero sí meter estas preguntas hasta la obsesión en la cabeza del lector. «La confesión del título puede hacer referencia a una confesión religiosa o policial, alguien que se descubre ante los demás», dijo el novelista.

Ocho años de escritura
Cabre es un escritor meticuloso, que se mueve por impulsos y deja que su intuición le guíe. Por eso, no ve extraño que haya estado ocho años escribiendo esta historia hasta que por fin la ha dado por acabada. «Paul Valery decía que los poemas no se acaban, se abandonan, y yo creo que la novela es igual», sentenció.


Éxito de «Les veus del Pamano»
Con «Les veus del Pamano», Cabré vendió 120.000 copias en Cataluña y 450.000 en Alemania. Holanda y Francia también cayeron en las redes del escritor y, como es lógico, las expectativas con su nueva novela son grandes. La editorial Destino publica hoy su versión en castellano, con una primera edición de 25.000 ejemplares (Proa lanza 18.000). Dos meses después se editará en Alemania y a principios de año llegarán las versiones italiana, holandesa y francesa.