Salamanca

Sinde sobre el archivo de Salamanca: «Estamos acabando con un estado de excepción»

La ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde, ha aseverado hoy que con la entrega de nuevos documentos que estaban depositados en Salamanca al Archivo Nacional de Cataluña se está "culminando un acto de justicia"y "acabando con un estado de excepción histórico".

Acompañada por el conseller de Cultura, Ferran Mascarell, la ministra ha formalizado hoy en el Archivo Nacional de Cataluña la entrega de una partida que llegó el jueves por la noche a Sant Cugat, formada por 365 cajas, que incluyen documentación incautada entre 1938 y 1939 a sindicatos, partidos políticos y particulares, como el dirigente de la Liga Regionalista Francesc Cambó, la anarquista Federica Montseny o el ministro Lluis Nicolau d'Olwer.

La ministra de Cultura ha dicho sentirse orgullosa de pertenecer a un Gobierno que ha hecho posible "este viaje de vuelta"y, en referencia a los ejecutivos encabezados por José María Aznar, ha indicado que "otros pudieron hacerlo antes y no lo hicieron". "Se trata -ha dicho- de archivos perfectamente registrados. No vuelven a Cataluña por ninguna arbitrariedad, sino porque son de Cataluña".

La ministra de Defensa, Carme Chacón, que también ha querido estar presente en el acto, ha ido más allá y ha mantenido que hoy "sería un buen día para que el PP pidiera disculpas a Cataluña"porque "ha impedido que días de dignidad y justicia históricas como el de hoy se pudieran vivir antes".

La Generalitat quiere más
Por su parte, Ferran Mascarell ha recordado que se trata de una entrega importante, "pero no del total de documentos que espera la sociedad catalana", por lo que entiende que hoy "todavía no es el día de la celebración final".

Durante su alocución ha mantenido que alguna cosa "no se ha hecho bien en el modelo cultural que se ha construido en España, cuando cuesta reconocer la pluralidad cultural y lingüística"y ha añadido que "no siempre el gobierno del Estado ha sentido como propia la reivindicación de los catalanes respecto de su cultura". "Si el Estado no acepta este plurilingüismo, siempre habrá agravios", ha advertido.

Respecto a los legajos que todavía están depositados en Salamanca, tanto la ministra de Cultura como el conseller han indicado que en septiembre se celebrará una reunión de la comisión mixta para ver exactamente lo que se tiene que devolver a Cataluña y han expresado su confianza en que antes de finalizar el año toda la documentación confiscada por el franquismo esté otra vez en manos de sus propietarios.

Los últimos documentos recibidos incluyen unas 350.000 imágenes y unas 219.500 piezas escritas (expedientes o documentos con una o más páginas escritas), que ahora se analizarán y ordenarán para garantizar su buena conservación.

Algunos de estos fondos pertenecen a entidades como la Asociación de Amigos de la Unión Soviética de Cataluña o la Sociedad Naturista de Barcelona; a particulares como Joan Lluhí Vallescà, Josep Pàmies Bertran o Eusebi Carbó y a sindicatos y partidos como la UGT, la CNT, ERC, POUM, PSUC y Estat Català.

Otras 660 cajas
Lo que queda por retornar, según el departamento de Cultura, son 660 cajas-archivadores, con documentación del denominado archivo de Vinaroz, de la agrupación de la Sección Especial, denominada Masonería A y B y Centro Israelita.

También quedan documentos sueltos como calendarios, carteles, sellos, fotografías, láminas y mapas; banderas, insignias, monedas, libros y publicaciones periódicas.

Antes de iniciarse el acto, una cincuentena de personas de la Comisión de la Dignidad, detrás de una pancarta en la que se leía: "Queremos todos los papeles. Todavía no hay nada por celebrar", se han manifestado a las puertas del Archivo Nacional para pedir que antes de finalizar el año vuelvan a Cataluña todos los documentos incautados durante la guerra civil.