Macroeconomía

La economía crece el 02 % entre enero y marzo y el 07 % en el último año

El Banco de España cifra en un 0,2% el crecimiento intertrimestral de la economía española, si bien considera que el ritmo de avance es todavía "débil".

En su último Boletín Económico de abril, el regulador explica que este crecimiento es igual que el registrado en los últimos meses del ejercicio pasado.

Además, en términos de crecimiento interanual, el PIB continuó la senda de "lenta"recuperación de los últimos trimestres, acelerando su avance en una décima, hasta el 0,7%.
"En los primeros meses de 2011 la economía española siguió creciendo a un ritmo débil, en un entorno caracterizado por la progresiva recuperación de la economía mundial, pero no exento de la aparición de nuevos focos de incertidumbre", señala el Banco de España.

El regulador explica que estas cifras son el resultado de una contribución negativa de la demanda nacional, de magnitud similar a la del trimestre precedente, y del aumento de la aportación positiva de la demanda exterior neta, que volvió a ser la principal fuente de expansión del gasto.

En cuanto a la demanda nacional, la "moderada"recuperación del consumo de los hogares y el incremento de la inversión en equipo contrarrestaron parcialmente el retroceso de los componentes públicos del gasto, afectados por los planes de austeridad del Ejecutivo. Sector a sector, todas las ramas productivas no agrarias, excepto la construcción, mostraron ritmos de crecimiento "moderadamente positivos", destacando el repunte de la actividad industrial.

En cuanto a la inflación, el Banco de España constata que, pese a la debilidad cíclica que sigue mostrando la economía española, el IPC prolongó su trayectoria ascendente, impulsada por factores "de naturaleza en principio transitoria, entre los que cabe destacar, principalmente, el encarecimiento de la energía".

El Banco de España también se refiere al empleo, asegurando que los ajustes de plantilla siguen desempeñando un papel "muy relevante"en los avances de la productividad, relegando a segundo término otros factores "que deberían estar jugando un papel más activo en esta fase del ciclo".

"Todo ello revela la existencia de rigideces estructurales que están complicando el ajuste de la economía española hacia un modelo de crecimiento menos basado en la construcción", sostiene el organismo.

Por otro lado, el organismo que gobierna Miguel Ángel Fernández Ordóñez se felicita de que, a lo largo del trimestre, España "se fue desligando"del grupo de países más afectados por las tensiones en los mercados de deuda soberana.

La mayor diferenciación en la percepción de los mercados se vio favorecida, según el Banco de España, por las medidas adoptadas para el fortalecimiento de la solvencia de las entidades de crédito españolas y por los avances esbozados en el ámbito de las reformas estructurales, tras la aprobación del Anteproyecto de Ley para reforma de los pensiones.