Una nueva voz en Europa por Ben Harris

Después de siete años el PSOE ha sido barrido del Gobierno, pero el mayor de los desafíos para el PP no ha hecho más que empezar. Mariano Rajoy comenzará su presidencia teniendo que enfrentarse a un desempleo record y a una deuda que han caracterizado a la economía española de unos años a esta parte, pero también al reciente incremento de los costes financieros, que ha sido la gota que ha colmado el vaso para empujar a las economías griega e italiana a una situación terminal. No hay tiempo que perder en implementer el plan económico que España necesita para salvarse.

La lección que se puede extraer de la coalición de Gobierno en Reino Unido es la eficacia de implementar significativas medidas en todos los departamentos de la Administración rápida y eficientemente, pero de la misma forma hacer un decidido compromiso para facilitar el crecimiento, y el compromiso de Mariano Rajoy para poner en marcha una economía de bajos impuestos será una buena noticia para los emprendedores. También será importante reestructurar la economía para fomentar el empleo y que las leyes laborales sean lo suficientemente flexibles para las necesidades de la economía española.

La experiencia y personalidad del presidente Rajoy y su Gobierno se adaptan bien a este desafío, y luchará para encontrar su voz en la escena internacional, cada vez más congestionada por voces deseosas de influenciar el futuro de la eurozona y de la economía global.

Mientras que las discrepancias abiertas entre los países europeos han sido mínimas, han surgido claras diferencias sobre cómo superar la crisis en la eurozona. Las relaciones han seguido siendo cordiales entre la canciller Merkel y el primer ministro Cameron, pero las diferencias sobre las política son claras. Cameron ha seguido oponiendose a entrar en la eurozona, apoyándose en la crisis del club europeo para reivindicar su postura. Al mismo tiempo, el ministro de Finanzas alemán, Wolfgang Schauble, ha respondido a Cameron subrayando que la futura integración de Reino Unido en la eurozona es inevitable.

Los primeros movimientos del nuevo Gobierno español en Europa señalarán si España adopta una posición más cercana a Reino Unido o a Alemania. El reciente cambio al frente del Gobierno italiano con el nombramiento de un comprometido eurófilo, Mario Monti, significa que España puede caer bajo la presión de Francia y Alemania para alinearse con sus tesis. La puerta del número 10 de Downing Street estará siempre abierta para Rajoy si busca reconstruir la relación que floreció bajo el liderazgo de José María Aznar y Tony Blair, pero mucho ha cambiado desde el 2000 y requerirá una buena dosis de fe por ambas partes.

Igualmente importante es que España encuentre una voz independiente, explore territorios fuera de Europa y aproveche la incomparable conexión que tiene con las economías emergentes de Latinoamérica. Como siempre, con las grandes crisis llegan grandes oportunidades, y Rajoy debe hacer ahora los cambios que permitan a España sobrevivir a su crisis y aprovechar sus oportunidades de tal forma que pueda recuperar su lugar como una potencia global.

Ben Harris
Pte. de Conservatives Abroad