País Vasco

Rajoy no transigirá con ambigüedades sobre ETA

Reclama unidad en el primer encuentro con las víctimas tras el «caso Bolinaga»

Rajoy besa a Consuelo, madre de Miguel Ángel Blanco
Rajoy besa a Consuelo, madre de Miguel Ángel Blancolarazon

BILBAO- Mariano Rajoy viajó ayer a Bilbao para formalizar ante las víctimas el compromiso de su Gobierno de no negociar «nunca» con ETA. En un ambiente nostálgico de tiempos de unidad en la lucha contra el terrorismo, el presidente del Gobierno trazó una línea de continuidad entre la política contra ETA de anteriores ejecutivos del PP –sin citar a Aznar– y la actual, y contestó a quienes le reprochan falta de firmeza que no «transigirá con las ambigüedades», ni cederá «nunca a ningún tipo de chantaje».

En el acto celebrado ayer en la sede de la Televisión Pública Vasca en Bilbao, se recordó cómo hace quince años salieron a la calle ciudadanos de todos los partidos para decir «basta» a ETA. A la convocatoria de la Fundación Miguel Ángel Blanco, que entregaba su Premio a la Convivencia a la sociedad española, acudió el socialista Carlos Totorica, quien como alcalde de Ermua encabezó las movilizaciones ciudadanas que reclamaron a ETA la liberación del concejal del PP posteriormente asesinado, y también Carlos Iturgaiz, entonces presidente del PP vasco.
A todos ellos, a los que representan el talante anterior más combativo de su partido en el País Vasco, y a los que pretenden conseguir los mismos objetivos con otras formas, aunque no por otras vías, y, especialmente a las víctimas, representadas por la hermana y los padres de Miguel Ángel Blanco y también por la presidenta de la Asociación de Víctimas del Terrorismo, Ángeles Pedraza, y la presidenta de la Fundación Víctimas del Terrorismo, Maite Pagazaurtundua, el presidente del Gobierno les dijo que «la unidad de los demócratas sigue siendo la mejor manera de homenajear a las víctimas».

Rajoy habló de la superioridad moral del Estado de derecho y del respeto a la ley «incluso cuando más pesar nos produce su aplicación», en referencia a la concesión de la libertad condicional al etarra Bolinaga, que tanta tensión provocó en el seno de su partido. En la misma línea, el presidente del PP vasco, Antonio Basagoiti, abogó por la unidad de los demócratas y se comprometió a trabajar para que «ETA no consiga dejando de asesinar lo que no ha conseguido asesinando». «El País Vasco tiene que ser España antes y después de ETA», dijo.
Desde el escenario, Marimar Blanco apoyó con rotundidad al Gobierno, pidió que no se ponga en duda su trabajo contra ETA y reprochó la crispación y la división, que, según dijo, sólo benefician a los terroristas.

En los pasillos, sin embargo, la presidenta de la Fundación Víctimas del Terrorismo, Maite Pagazaurtundua, expresó una cierta desconfianza al asegurar a LA RAZÓN que, «aunque quizás hace falta una distancia temporal para juzgar la política antiterrorista del Gobierno y aunque quizás no tenemos todas las claves, hay cosas que han resultado extrañas para algunas víctimas».

 

Ninguno de los otros 13 «bolinagas» podrá salir de prisión
El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, hizo referencia ayer, durante la primera Reunión Iberoamericana de Ministros del Interior y de Seguridad Pública, a la lista de otros 13 presos etarras enfermos que «se pone sobre la mesa». El dirigente del PP señaló que «la administración penitenciaria está acostumbrada a peticiones o presiones de esas características» y al Ejecutivo no le afectan «lo más mínimo». Asimismo, reiteró que, según los informes de los que disponen, «ni uno solo de esos presos cumple los requisitos que la ley exige para, en su caso, proceder a una progresión de grado o una libertad condicional» y que, por ese motivo, «ya pueden decir lo que quieran que, evidentemente, no se va a producir ningún tipo de modificación en su situación penitenciaria». Hay que destacar que a esta reunión asistió también la presidenta de la AVT, Ángeles Pedraza.