Una explosión en una base naval de Chipre deja 16 muertos

Entre los muertos hay seis bomberos, y el número de heridos supera ya los 40, señala el diario local "Filelefteros"en su edición digital. Fuentes de la policía chipriota explicaron a Efe que en la base naval había en el momento de la explosión unos 180 militares.

El presidente de Chipre, Dimitris Christofias, se mostró consternado por lo sucedido, que calificó como "desastre bíblico"y como "un día negro"para la historia del país. "Los daños materiales se pueden arreglar pero las vidas humanas no", destacó el presidente en una declaración a la prensa, al expresar sus condolencias a las familias de las víctimas.
El desastre de hoy se ha cobrado también ya las primeras víctimas políticas, con la dimisión del ministro de Defensa, Costas Papacostas, y del jefe de la guardia nacional, Petros Tsalikides.

La enorme explosión ha provocado cortes de electricidad que han afectado a la isla a primeras horas, debido a la proximidad de la central eléctrica, que ha quedado fuera de servicio.
La carretera entre la ciudad de Nicosia y Limasol, a una distancia de 500 metros de la base, presenta imágenes de coches afectados por la explosión, con las ventanillas rotas y con daños por la colisión con otros vehículos.

Un testigo ocular que en el momento de la explosión estaba pescando a pocos metros de la zona, declaró a la televisión local que lo sucedido "parecía un fuerte terremoto".
"No podía darme cuenta de lo que pasaba", comentó el hombre, "y de repente he visto el humo negro", agregó.

La explosión también ha causado graves daños en propiedades cercanas a la base naval, con unas 150 personas evacuadas. La policía ha acordonado la zona y ha prohibido el tránsito de cualquier medio de transporte, excepto de las ambulancias.

Antes de dimitir, Tsalikides explicó que hubo "una explosión en contenedores de munición confiscados a un barco hace tres años". La prensa chipriota sostiene que el material explosivo fue requisado en Limasol en enero de 2009 a un barco de bandera chipriota que salió de Irán y se dirigía a Siria, por temor a que el cargamento acabase en manos de la milicia chíi libanesa de Hizbulá.

En el puerto había almacenados 98 contenedores de pólvora, de los que dos se incendiaron y explosionaron poco antes de las 06.00 hora local (03.00 GMT). La televisión local informó de que el pasado miércoles el Ministerio de Defensa y la Autoridad de Electricidad tuvieron una reunión centrada en el traslado de los explosivos por el peligro que revestían.

Aún se desconocen las circunstancias en las se produjo el incendio en los depósitos y la policía anunció que irá ofreciendo nuevos detalles sobre el suceso a lo largo de la jornada.
La base naval "Evangelos Florakis"tiene ese nombre en memoria del jefe del Estado Mayor del Ejército chipriota Evangelos Florakis, que perdió la vida junto a otros cuatros oficiales el 10 de julio de 2002 al estrellarse el helicóptero en el que viajaban en la ciudad de Pafos.