ANÁLISIS: El retorno de un clásico por Hilario J Rodríguez

l ¿Qué supuso para el género de ciencia-ficción el estreno de «Alien» a finales de los setenta?
–Fue la reintrepretación cultista de lo que supuso «La guerra de las galaxias». George Lucas reinterpretó viejos mitos, leyendas y fábulas en un cóctel que Ridley Scott llevó a un terreno más literario. No en vano, la primera referencia en «Alien» lo encontramos en el nombre de la nave, «Nostromo», perteneciente a la novela de Joseph Conrad. Y su primera película, «Los duelistas», era una adaptación de Conrad. Scott sofisticó lo que en «La guerra de las galaxias» era casi un videojuego y lo convirtió en un programa de ordenador de diseño arquitectónico. En su siguiente película, «Blade Runner» (1982), lo llevó hasta sus ultimas consecuencias.

l Las tres primeras películas de Scott son joyas cinematográficas. ¿Le ha pesado posteriormente en su filmografía?
–Por ejemplo, «Legend» (1985), protagonizada por Tom Cruise, fue un fracaso. Pero vista hoy, y comparada con las pretensiones intelectuales de las producciones de los años ochenta descubres una película muy digna y que denota ambición. Y otro filme como «Thelma y Louise» (1991), que antes me parecía irresponsable, ahora comienzo a admirarlo.

l ¿Ha hecho suyos nuevos lenguajes en su filmografía?
–Scott ha sabido incorporar –y no de forma descerebrada como su hermano Tony Scott–, nuevos lenguajes de la imagen como el videoclip o el videojuego dentro de un clasicismo narrativo que no ha olvidado lo mas importante: que el cine es un vehículo para contar historias. Alterna proyectos mínimos con otros que le aseguren la continuidad en una industria exigente. Ahora le toca dar en la diana.

Hilario J. Rodríguez
Crítico y ensayista