La izquierda en «campaña»

En poco más de una semana se sabrá quién ha ganado las elecciones municipales y autonómicas, así como el alcance de la derrota. La percepción generalizada, avalada por todas las encuestas, es que ganará el PP y que, incluso, puede hacerlo con una gran contundencia si arrebata algunos feudos emblemáticos al PSOE. Un elemento que indica que la tendencia es muy buena para los populares es el nerviosismo en las filas de la izquierda política, pero especialmente en la mediática. El nivel de insultos y descalificaciones contra Rajoy y el PP lo pone de manifiesto. Es parecido a lo que sucedió entre 1993 y 1996. La historia se repite. Este mal estilo es tanto un síntoma de esa previsible victoria como el reflejo de los enormes intereses que hay en juego. La alternancia es una de las virtudes de la democracia. En los países de nuestro entorno, la izquierda no actúa con ese sectarismo y zafiedad. Es tan importante saber ganar como perder. No hay que olvidar que el poder no es un botín, sino un instrumento para servir a la sociedad.