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Óscar Freire: «No me vale ser segundo»
Cuando, acabada la cuarta etapa del Tour Down Under, el pistoletazo de salida de la temporada ciclista, Andreas Klier y David Millar llegaron al hotel se tiraron a la cama. Destrozados.
Con las piernas en alto, Klier le decía a Millar que no entendía cómo había sido capaz ni siquiera de acabar la etapa. Estaba vacío. Tenía la pareja del Garmin la ventana abierta y comenzaron a escuchar sonidos, un partido de tenis. Al asomarse vieron que quien jugaba era el ganador de aquella cuarta etapa, Óscar Freire. Aún tenía energía, aún la tiene, pues sigue igual de competitivo que allá por el mes de enero y que mucho más allá aún: 1998, cuando se vistió por primera vez de profesional. Desde entonces, tres San Remos adornan su palmarés. Y mucho más. Y quiere más también, la cuarta primavera. La última «Classicissima»
–Ya van diez visitas a San Remo. Y de tres de ellas ha vuelto con triunfos.
–Quitando el año pasado por la caída siempre he estado con los mejores. Excepto Zabel, no creo que nadie tenga un palmarés tan bueno como el mío en esta carrera. Me veo competitivo, he probado en tres carreras y he ganado en dos. En la otra –Tirreno–, he hecho segundo. Sé que estoy bien al esprint este año, me encuentro muy, muy bien.
–¿Mejor que el año pasado?
–Sí. Esprintando me encuentro mejor. Subiendo no, pero sé que para la San Remo estaré óptimo.
–Se dice que es la más fácil de las clásicas, pero usted defiende que es la máscomplicada.
–Es de las más fáciles de perder en nada, en un minuto, en cualquier sitio se te puede ir. Prácticamente empiezas y subes el Turchino. Tienes que estar delante para bajar porque nunca se sabe si hay una caída o si se cortan.
–¿Quién puede ganar?
–A los que me espero son a Nibali y a Sagan, que le va bien todo y está que se sale. También a Boonen, tiene experiencia y se motiva para esta carrera. No he visto nada bien a Petacchi, y a Gilbert, fatal.
–¿Y Cavendish?
–Yo no le veo delante. Me sorprendió muchísimo cuando ganó.
–La mítica Vía Roma sigue de obras, pero el año que viene vuelve al recorrido.
–Sí, dicen que la han asfaltado. Pero me da igual, el año que viene no la voy a correr.
–¿Seguro? ¿Aunque llegue esa oferta de Katusha que ya se comenta para renovarle?
–No. No es cuestión de oferta ni de dinero. Espero hacerlo bien esta edición y si gano el Mundial seguro que corro otro año. Sería la única opción.
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