Francia

Zapatero y Sarkozy defienden en la ONU una tasa sobre las transacciones financieras para combatir la pobreza

El presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y su homólogo francés, Nicolas Sarkozy, han defendido hoy ante la Asamblea General de la ONU el establecimiento de una nueva tasa a las transacciones financieras internacionales que contribuya a financiar la lucha contra el hambre y la pobreza, y ha mantenido el objetivo de España de llegar a destinar el 0,7% del PIB para ayuda oficial al desarrollo en 2012.

"Mi Gobierno se compromete a defender y a llevar a la práctica la nueva tasa", ha afirmado Zapatero entre aplausos de los asistentes. "El sistema financiero ha visto que los países salimos en su rescate y parece sensato, justo y lógico que les pidamos un mínimo esfuerzo para sacar de la miseria a millones de personas", ha añadido.

De esta forma, el jefe del Ejecutivo dijo que aprovechará la presencia de España en los foros internacionales, en el G20 y la Unión Europea, para defender la nueva tasa a las transacciones financieras para cumplir con los Objetivos de Desarrollo del Milenio. "Lo tenemos que hacer y lo vamos a hacer", ha sentenciado.

Zapatero ha subrayado que otra de las condiciones para lograr que se cumplan esos objetivos en 2015 es que los países mantengan el esfuerzo a favor de la ayuda al desarrollo "a pesar de la crisis", y aunque ha reconocido que los problemas económicos "frenarán"algunos esfuerzos, España mantiene su objetivo de llegar al 0,7% en 2012.

España, dijo el presidente, es el país desarrollado que más ha destinado a ayuda oficial al desarrollo en los últimos cinco años, periodo en el que "duplicó"sus contribuciones y se ha convertido en un donante decisivo para el sistema de Naciones Unidas, en especial en la lucha por la seguridad alimentaria y por la igualdad de género.

Zapatero ha felicitado a la ONU por la iniciativa de los Objetivos de Desarrollo del Milenio lanzada hace diez años. "Desde entonces ha habido avances, aunque no todos los que deseamos", ha reconocido el presidente, quien en todo caso ha subrayado que se pueden lograr de aquí a 2015 y el avance será "sustancial"si los países cumplen sus compromisos.

Por su parte, el presidente de Francia, Nicolas Sarkozy, tambiénabogó desde la tribuna por imponer un nuevo impuesto que grave las transacciones financieras, con la intención de que esta "innovadora"forma de recaudación sirva para financiar la ayuda al desarrollo. 

"¿Por qué esperar?", preguntó Sarkozy, en relación a una medida defendida por algunas de las principales potencias y que forma parte de la intención de buscar "fuentes de financiación innovadoras". "La banca se ha globalizado", recordó el dirigente galo, quien apuesta por que el sector financiero también se sume al deseo global de "estabilización del mundo".

"Ahora que todos los países desarrollados están en déficit, hace falta encontrar nuevas fuentes de financiación para la lucha contra la pobreza, la educación y la resolución de grandes pandemias sanitarias del planeta", agregó Sarkozy. 

El presidente francés prometió que su Gobierno incrementará en un 20 por ciento durante los próximos tres años los fondos que destina a la lucha contra enfermedades como el sida, el paludismo y la tuberculosis.

Este repunte supondría incrementar de 300 a 360 millones de euros el dinero que Francia destina al Fondo para el Logro de los Objetivos de Desarrollo del Milenio (ODM). Los ODM, asumidos en el año 2000, contemplan diez objetivos concretos de reducción de pobreza o acceso a la educación, entre otros, que deberían alcanzarse antes de 2015.

Sarkozy recordó que aunque la crisis económica ha sido "severa"en los últimos años con los países ricos, ha tenido consecuencias "bastante peores"para los pobres. "No tenemos derecho a escudarnos en una crisis económica para hacer menos", subrayó el presidente francés.