Nuestra salud encerrada en el «smartphone»

Barcelona- «Donde antes te preguntaban qué música llevas en el teléfono móvil ahora es qué aplicaciones tienes», señala Jorge Juan Fernández, director del área de eHealth y Salud 2.0 del Hospital Sant Joan de Déu de Barcelona. Hacer una fotografía y retocarla al instante para colgarla en la red segundos después, descubrir nombres de estrellas con la ayuda de un mapa virtual que gira según nuestra posición, éstas son algunas de las infinitas posibilidades que ofrecen la nueva generación de teléfonos móviles a través de lo que se denomina aplicación, programas que se descarga desde el mismo aparato y cuyo coste puede variar de los 0 euros a los 50. Divierten, enseñan, facilitan el día a día y también son salud.
Promoción y prevención
Existen más de 6.000 aplicaciones dedicadas al bienestar de las personas y la mejora de su salud. Asimismo, éstas pueden diferenciarse en tres grandes grupos: las que se centran en la promoción de la salud y la prevención, las que ayudan en seguir un tratamiento o a controlar una enfermedad y las dedicadas exclusivamente al colectivo médico. Como ejemplo de las primeras cabe destacar la aplicación ganadora de la competición organizada en el primer encuentro europeo de la materia y que tuvo lugar en el Hospital Sant Joan de Déu recientemente, la «In Shape Moms». Su finalidad es ayudar a las futuras mamas a entender el día a día del embarazo proporcionándoles información sobre la evolución, síntomas y ejercicios prácticos, entre otros. También las hay que fomentan los buenos hábitos o que estimulan la práctica de ejercicio contando kilómetros recorridos y calorías quemadas, por ejemplo.
Un sistema para monitorizar los niveles de glucosa en sangre con la ayuda del teléfono portátil es un claro ejemplo del segundo tipo de aplicaciones dedicadas a la salud. De hecho, existen más de 60 para controlar la diabetes y el propio hospital Sant Joan de Déu lo ofrece a sus pacientes. Otro ejemplo sería «MedsOntime», de la empresa Mediactive, que descarga gratuitamente la administración de medicamentos ya sea para por un corto o largo lapso de tiempo. Se trata de la primera aplicación lanzada por esta compañía al mercado, aunque desde el mes y medio que está operativa ya acumula 6.000 usuarios.
El tercer tipo de aplicaciones es el que ofrece contenidos a los profesionales. De forma rápida, los médicos pueden acceder, por ejemplo, al listado de síntomas de un determinado tipo de patología. También pueden hacerlo a través de Internet, pero de esta manera la consulta puede hacerse con la seguridad de que la información no ha sido contaminada.
Pero, ¿cuáles deben ser las características para que una aplicación sirva y guste? «Tiene que resolver problemas de verdad y minimizar la introducción de datos por parte del usuario», explica Fernández. Casi en los mismos términos lo expresa el director de Mediactive, Josep Cardona, «ha de ser ágil y fácil de utilizar y que el resultado sea rápido».

Un negocio con mucho futuro
El 25 por ciento de los españoles posee un «smarphone» y se estima que en dos o tres años el 75 por ciento de la población tenga acceso a internet en el móvil. Desarrollar aplicaciones móviles es un negocio en auge aunque su monitorización sea hoy aún una cuestión por resolver. Crear un programa de estas características necesita entre tres o cuatro meses de trabajo de ingeniería y su coste oscila entre 12.000 o 18.000 euros.