El «Silicon Valley» madrileño en 2011

La presidenta de la Comunidad y el alcalde de la capital firmaron ayer el convenio de cesión por cincuenta años a la Carlos III con el objetivo de que, a partir de septiembre de este mismo año, la universidad convierta los 23.265,58 metros cuadrados del Mercado de Puerta de Toledo en un campus urbano con cinco áreas interconectadas.

Estas áreas, según explicó ayer el rector de la UC3M, Daniel Peña, albergarán un centro internacional de postgrado y otro de formación continua; espacios de la cultura, del emprendedor y de la creatividad y un punto de encuentro internacional para estudiantes nacionales y extranjeros.

En, aproximadamente, un mes la universidad comenzará los trabajos de transformación de las cuatro plantas del edificio, así como del resto de su entramado urbano, con el objetivo de que la vida universitaria revitalice el bario, la vida cultural, los comercios e incluso el mercado del alquiler del distrito de Arganzuela hasta convertirlo en el «Silicon Valley» de España, afirmó Aguirre. Un objetivo que tanto Esperanza Aguirre, como Alberto Ruiz-Gallardón se mostraron ayer convencidos de que con el convenio firmado se alcanzará, después de tantos años de «desatino».

Una deuda con los vecinos
Tal y como reconocieron ayer el alcalde y la presidenta, ninguno de los dirigentes autonómicos han logrado, desde la creación del mercado en 1934, dar con una fórmula exitosa para su explotación. Y es que, pese a su ubicación privilegiada y que el centro ha intentado ser sede de diferentes colectivos comerciales y culturales, nunca se logró alcanzar las expectativas previstas. «Con la firma de este convenio hemos corregido un error de muchos años y hemos saldado una deuda con el mercado», admitió Ruiz-Gallardón.

Fue hace aproximadamente dos años, cuando la Universidad Carlos III propuso a la Comunidad la cesión del mercado para convertirlo en un centro educativo. La propuesta logró obtener rápidamente el respaldo del Ayuntamiento, propietario del edificio, y de Esperanza Aguirre que , con la firma de ayer, renunció a la gestión y explotación del centro. Pero antes de que el Gobierno regional deje el mercado, deberá resolver los contratos de los pocos comerciantes que aún resisten en su interior. Unos contratos que en algunos casos tienen vigencia de meses y otros de años. La Comunidad tendrá por tanto que negociar, en los casos en los que sea necesario, las indemnizaciones a aquellos comerciantes con los que no se pueda cumplir el contrato de alquiler, ya que el compromiso adquirido ayer por Aguirre le obliga a devolver el mercado al Ayuntamiento en perfecto estado de conservación y libre de cualquier carga.

Posteriormente, el Consistorio cederá a cambio de un cánon anual la explotación a la universidad. Hasta el año 2018, la Carlos III no tendrá que abonar ninguna cantidad. Durante los tres siguiente años deberá pagar anualmente 25.000 euros. La cantidad subirá hasta los 50.000 euros, posteriormente a los 75.000 y, a partir del año 17, la universidad pagará 100.000 más el IPC, hasta los cincuenta años.