La Unió denuncia una oleada de robos en granjas de la Plana Alta

CASTELLÓN- Primero fueron los agricultores los encargados de denunciar la cantidad de robos que sufren en sus campos, y ahora le ha tocado el turno a los ganaderos. Por esta razón, la Unió de Llauradors i Ramaders puso ayer sobre la mesa una problemática a la que se han visto sometidos en los últimos días: una oleada de robos en granjas de animales de la comarca castellonense de la Plana Alta que se ha enfrentado a la impotencia de estos pastores que no pueden permitirse tener vigilancia privada en las mismas.
Según fuentes de la Asociación, los robos en la zona son continuos y en los últimos quince días una granja de la localidad de les Coves de Vinromà vio cómo le robaban hasta 40 cerdos a punto de ser comercializados, con un peso superior a los 100 kilogramos.
El «modus operandi» pone de manifiesto que los autores del delito sabían lo que hacían, pues fueron seleccionando los mejores animales.
El hecho de que los robos se hayan cometido con premeditación supone, para las mismas fuentes, que «se trata de mafias organizadas» que poseen los medios de transporte adecuados y que además tienen asegurada la compra posterior de los cerdos, que en el mercado alcanzarían la cifra de 5.000 euros.
Ante estos hechos, la Unió reclamó mayor vigilancia en las zonas rurales para evitar este tipo de robos e insistió en la necesidad de cambiar el actual Código Penal y, con ello, la tipificación de los delitos en el sector agrario. Asimismo, lucharán para que dejen de considerarse como una falta si no supera los 400 euros.