España

ANÁLISIS: Cambio de táctica por Enrique Gozalo

La Razón
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l ¿El partido del día 10 puede servir de referencia para calibrar la potencia de Italia?
–El encuentro de la primera fase habrá que tenerlo en cuenta. Ese día los italianos maniataron a España, demostraron su ambición y en la primera parte obligaron a trabajar a Casillas. Lo que no sabemos ahora es si Prandelli volverá a cambiar el sistema y jugará con tres centrales –De Rossi actuó en esa posición– como hizo en Gdansk.

l ¿Ha ido Italia de menos a más en el campeonato?
–Sí, sin duda. Pasó la primera fase con angustia al no poder ganar a Croacia y temió por el «biscotto». No hubo apaño –ahora muchos españoles se lamentan de ello– y la selección de Prandelli ha crecido. El equipo se ha convencido de que sus argumentos, basados en la posesión, en el buen trato al balón y en buscar la portería contraria, son los correctos.

l ¿Deslumbra Pirlo?
–Se ha convertido en el «reggista». Es el que ordena y manda, el que pone la pausa y filtra un pase imposible. Técnicamente es muy bueno y, además, está muy bien físicamente a sus 33 años. Plena madurez de un jugador que fue compañero de Guardiola en el Brescia y que juega de forma semejante a como lo hacía Pep.

l Sin embargo, Prandelli ha logrado que prevalezca el bloque sobre las individualidades.
–Buffon, Balotelli, Pirlo, De Rossi. Nombres hay muchos y buenos, pero en la actual Italia manda el sistema. Defensa correcta a la que le cuesta sacar el balón y que tiene en Maggio su jugador de más progresión por la banda. Marchisio se ha convertido en el escudero de Pirlo con su trabajo de ida y vuelta, mientras que Montolivo, inédito ante «La Roja», pone la calidad para enganchar con el ataque donde Cassano aporta toque y poco físico.

l ¿Qué Italia veremos mañana?
–A pesar de que Prandelli ha comentado que España ha bajado de nivel futbolístico, seguro que toma precauciones. Y no se puede descartar una defensa de cinco o la entrada del ex azulgrana Thiago Motta en el once titular. Jueguen los que jueguen, serán competitivos, tienen ese gen y tratarán de mantener su filosofía para que la Selección de Del Bosque no se encuentre cómoda. Desde la experiencia y el convencimiento, manejan los partidos con criterio y no se asustan en exceso cuando el rival les domina.