Fuencarral
«Dejadme en paz Quiero morir»
Dos policías evitan que un hombre de 25 años se queme a lo «bonzo». El joven ya se había rociado con gasolina en un banco de Fuencarral
Madrid- Ya se había echado por encima la gasolina y tenía el mechero en la mano. Sólo le hacía falta el último «empujón» de valor para hacer lo que, afortunadamente, no se atrevió a rematar. Los gritos de este hombre de 25 años a las dos de la madrugada de ayer alertaron a los vecinos, que llamaron a la Policía advirtiendo de que un hombre pretendía quemarse a lo «bonzo».
El suceso tuvo lugar a la altura del número 42 de la calle Melchor Fernández Almagro, en el distrito de Fuencarral, hasta donde se desplazaron varios coches patrulla gracias a la llamada recibida en la Sala del 091, que alertó de que una persona sentada en un banco se estaba rociando con líquido inflamable.
Dos agentes destinados en el Grupo de Atención al Ciudadano lograron impedírselo en el último momento. Los agentes se acercaron al lugar y encontraron al joven sentado en un banco de la citada calle. Se acercaron por la espalda del joven, que desprendía un fuerte olor a gasolina y se abalanzaron sobre él en el momento en que intentaba encender un mechero.
Así lograron arrebatarle el encendedor que llevaba en la mano y otro que llevaba en un bolsillo del pantalón.
Según la Jefatura Superior de Policía, durante toda la intervención el joven se mostró agresivo con los efectivos. Algunos testigos presenciales afirman que el hombre espetó a los agentes: «¡Dejadme en paz! ¡Dejadme morir!»
Una vez reducido, los agentes solicitaron la presencia en el lugar de una ambulancia. Tras una primera asistencia para tratar las abrasiones sufridas en la piel a causa del combustible que se había rociado anteriormente por todo el cuerpo, los servicios médicos trasladaron al joven hasta el hospital Gregorio Marañón, donde a lo largo de la jornada de ayer fue recibiendo los cuidados necesarios.
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