Portugal

La inversión se refugia en el oro

El mercado ha redefinido el patrón oro. Ya no soporta el valor de las divisas, pero sirve de termómetro del crecimiento estatal y puede ser utilizado incluso para mitigar el impacto de un rescate financiero.

Los países periféricos deberían plantearse la venta de oro para reducir su elevada deuda
Los países periféricos deberían plantearse la venta de oro para reducir su elevada deudalarazon

EE UU ve peligrar su hegemonía mundial ante los planes de China, que pretende elevar sus reservas de este metal precioso para confirmar la pujanza de los emergentes en este nuevo escenario surgido de la crisis financiera.
Las compras masivas de oro por parte de algunos bancos centrales de todo el mundo prometen disparar aún más la cotización de este metal precioso. El valor refugio por excelencia podría alcanzar los 2.000 dólares por onza en el presente ejercicio, según algunos analistas, y las previsiones animan a los inversores a entrar en un mercado al alza. El récord histórico de 1.546,5 dólares marcado el pasado martes no es el techo, pese a que después cayera con fuerza en las últimas sesiones de la semana.
La debilidad del dólar frente a otras divisas favorece la revalorización del oro y los bancos centrales prefieren reducir su exposición a la moneda estadounidense para flexibilizar sus inversiones. La posesión de este metal precioso también es un indicador de la potencia de una economía, y EE UU es el principal tenedor de oro, con más de 8.000 millones de toneladas, mientras que China es el sexto, con más de 1.050 toneladas. El gigante asiático quiere entrar con fuerza en esta guerra de colosos, y el Banco Central de China planea incrementar sus reservas de oro en los próximos meses intercambiándolas por las de dólares. El Banco de México (Banxico) ya movió ficha el martes y anunció una compra masiva de oro en el primer trimestre. Concretamente, 100 toneladas del metal precioso valoradas en unos 5.000 millones de dólares (unos 3.400 millones de euros).

El dilema luso
La situación que atraviesa Portugal, cuyo elevado endeudamiento público (93% de su PIB) ha llevado al país al balcón de la bancarrota estatal, ha hecho correr ríos de tinta en los últimos meses. Coincidiendo con la subida del oro, los expertos, sobre todo de origen alemán, no han dudado en aconsejar a las autoridades lusas que utilicen sus reservas de metal precioso para mitigar su endeudamiento y reducir la cuantía del rescate financiero por parte de la Unión Europea.
Se da la circunstancia de que Portugal es el país de la UE con mayores reservas de oro en su poder en relación con su PIB. El Estado luso tiene 383 toneladas de este metal precioso, con un valor a precios actuales de mercado cercano a los 20.000 millones de dólares (unos 17.000 millones de euros), el 9% de su PIB, según datos del Fondo Monetario Internacional (FMI).
La venta de parte de sus reservas de oro en este momento de «fiebre en el mercado» y demanda alta permitiría al país vecino reducir su endeudamiento y evitar la repercusión del plan de rescate de la UE. No en vano, las 383 toneladas que posee el Estado luso representan el 22% de los 78.000 millones de euros que la UE inyectará en su economía para paliar los efectos de la crisis de deuda.