Juegos Olímpicos

Buenos Aires

Objetivo: convencer al COI

-La candidatura madrileña nace para seducir al olimpismo-Hasta ahora no se habían unido tantos factores positivos 

La expedición de Madrid 2016 en su intento de lograr los Juegos en Copenhague en 2009
La expedición de Madrid 2016 en su intento de lograr los Juegos en Copenhague en 2009larazon

Madrid ya ha hecho lo más difícil para convertirse en sede de los Juegos Olímpicos 2020. Madrid cumple todos los requisitos, además de experiencia y perseverancia, un aliciente muy valorado en el mundo deportivo. El último ejemplo fue la ciudad coreana de PyeongChang que se presentó hasta en tres ocasiones consecutivas. Todos los expertos coinciden en que a diferencia de otras ciudades, la capital española es la única que presentó un proyecto real para conseguir los juegos 2016, que finalmente se adjudicaron a Río de Janeiro. Por entonces, Madrid tenía una corazonada y más de las tres cuartas partes del proyecto estaban terminadas. Pero la alternancia continental fue el gran obstáculo para que el Comité Olímpico Internacional (COI) se decidiera por un país sudamericano. Por primera vez en la historia de los Juegos Olímpicos, el organismo internacional concedía el evento a este continente. En esta ocasión, la capital tiene todo a favor para conseguir el gran sueño olímpico. La ciudad tiene el 80 por ciento de las infraestructuras construidas, así que el Ayuntamiento de Madrid anunció que no será necesario realizar una inversión en las instalaciones olímpicas hasta que el COI tome una decisión sobre los Juegos Olímpicos de 2020 el 7 de septiembre de 2013 en la ciudad argentina de Buenos Aires. El alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón confirmó que el gasto público será mínimo y que se compromete a no hacer inversiones hasta esa fecha. Los partidos mayoritarios de la corporación municipal aseguraron que la candidatura no será ajena a la crisis que los ciudadanos están sufriendo, aunque el alcalde recordó que «de aquí a 9 años, habremos superado la crisis». Tanto el primer edil como el portavoz socialista, Jaime Lissavetzky, se mostraron optimistas ante las posibilidades de la ciudad, después de reconocer que habían entablado conversaciones con responsables deportivos para recoger opiniones. «En todos estos años hemos ido a mejor. En los JJ OO 2012 quedamos terceros, para los de 2016, fuimos finalistas, así que tenemos fundadas razones para creer que podemos ganar esta vez», dijo Gallardón. Los miembros españoles del COI han confirmado en varias ocasiones que el ambiente que se respira en el organismo es positivo para Madrid. «He tenido la sensación de que causaba satisfacción la posibilidad de que Madrid se presentase. Ahora, con la confirmación, pienso que algunos se habrán sentido incluso liberados, porque se habían quedado con las ganas en el estómago de dar los Juegos a Madrid», comentó José Perurena desde Suráfrica, donde asistió la semana pasada a las reuniones del COI. No hay que olvidar que el presidente del organismo internacional, Jacques Rogge, pidió en una reunión con el secretario de Estado para el Deporte, Albert Soler, y el presidente del COE, Alejandro Blanco, que Madrid presentase su candidatura. El Ayuntamiento de Madrid sólo tiene que rentabilizar la inversión que ya realizó en los años anteriores. No obstante, la decisión tiene sus detractores como UPyD, cuyo portavoz adjunto en el Parlamento regional, Ramón Marcos, explicó que su partido está «totalmente en contra» de la decisión de organizar los Juegos y anunció que en los próximos días presentarán una Proposición No de Ley para «intentar que la Asamblea se pronuncie sobre la poca idoneidad de este concurso para 2020». Por su parte, el republicano Jordi Portabella, presidente del grupo municipal de Unitat per Barcelona con el que ERC forma tándem con Joan Laporta en el consistorio barcelonés, afirmó que Madrid no puede organizar los Juegos si antes no presenta un plan financiero para sanear sus cuentas. «En lugar de presentar su candidatura a un acontecimiento de este tipo que obliga a hacer grandes inversiones, debería tener un plan de saneamiento», reiteró Portabella.