Ordóñez: «La reforma de las cajas tendría que haberse hecho antes»

El gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, aseguró ayer que la reforma de la gobernanza de las cajas de ahorros y su sometimiento a la disciplina del mercado «se debería haber acometido antes, en los buenos tiempos, y no en medio de la crisis», reflexión que extendió también a otras que se están abordando ahora como la del gasto público, las pensiones o la laboral. Del actual marco de relaciones laborales dijo que pone trabas a la creación de empleo e incentiva a utilizar la destrucción del mismo como mecanismo de ajuste. «Bastaría con que los empresarios españoles pudieran ofrecer empleo con salarios acordes con su productividad a esos millones de desempleados y que éstos pudieran tener la posibilidad de decidir sobre unas ofertas que hoy ni siquiera pueden plantearles».

La recuperación tarda
Para el gobernador del Banco de España, nuestro país tiene que armarse de paciencia en materia económica. «Todavía es pronto para que nuestra economía esté en condiciones de reanudar una fase de crecimiento vigoroso. La clave ahora es no detenerse, continuar con las reformas, con todas, incluida la de las cajas de ahorros». Pero para Fernández Ordóñez reducir el paro y aumentar el empleo son objetivos económicos capitales en la actual coyuntura económica, que redundarían en un saneamiento de las cuentas públicas o una reducción de la morosidad, que animaría la concesión de créditos.

En el transcurso del XVIII Encuentro del Sector Financiero organizado por Deloitte, Sociedad de Tasación, SAP y ABC, Fernández Ordóñez dijo que, finalmente, serán 13 los proyectos que el Banco de España acabe analizando, dando por descontado que Cajastur, Caja Extremadura y Caja Cantabria seguirán juntos tras la ruptura con la CAM.

El gobernador de la institución monetaria dijo que el capital privado será bienvenido en las cajas porque hay que tratar de minimizar el impacto de reestructuración en las cuentas públicas. Pero lo importante, añadió Fernández Ordóñez, de cara a los inversores, «es que se sepa que todas van a estar por encima del 8% o del 10% de capital principal sobre activos ponderados por riesgo».