Ministerio de Justicia

El embudo socialista

La Razón
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Siguen sin aceptar la acción de la Justicia. Como la Fiscalía no recurrirá ante el Tribunal Supremo el veredicto absolutorio del tribunal del jurado para el expresidente de la Generalitat, Francisco Camps, y Ricardo Costa, los socialistas acusan al Ministerio Público de falta de independencia, de estar a las órdenes del Gobierno.
Resulta que ahora es dependiente porque actúa con racionalidad y, antes, esa misma Fiscalía lo hacía correctamente, con independencia, porque respondía a sus deseos. En mi pueblo esto se llama «la ley del embudo». ¿Por qué no es al revés? ¿Que antes obedecía al Gobierno y ahora es soberana? Prefieren ser fieles a aquello «Justicia, mas no por mi casa».
Digo que actúa con racionalidad porque, al corresponder tan sólo un recurso de casación ante el TS, lo habitual en el desarrollo procesal es renunciar a esa vía. Al PSOE, sin embargo, no le satisface y, además de lanzar una acusación interesada, ha optado por recurrir a pesar de la improcedencia de esta decisión. Aunque admite controversia jurídica, no es adecuado el recurso del PSOE como acusación particular porque no fue el que inició el proceso sino la Fiscalía. Por tanto, la intervención socialista adquiere el carácter de «coadyuvante y adhesiva» respecto a la acción del Ministerio Público. En buena lógica, al desaparecer el fiscal, no hay a quién ni a qué adherirse. Pero les da igual.
A los socialistas les trae al fresco la lógica y la rectitud jurídicas. Prefieren continuar con la politización del asunto y tener un minuto más de gloria mediática.
Así es la vida.