Nueva York

El Museo del Sexo de Moscú con él llegó el escándalo

En un mes de vida, el museo «Tochka G» (traducido como «Punto G») se ha convertido en un espacio tan controvertido como popular en la capital rusa.

La artista con el cuadro "Lucha libre", uno de los más polémicos del museo
La artista con el cuadro "Lucha libre", uno de los más polémicos del museolarazon

Abrió sus puertas hace un mes y aún no ha cesado el escándalo generado en torno al Museo del Sexo de Moscú, que se ha bautizado como «Punto G». La capital rusa se une así a ciudades como París, Nueva York, Praga o Berlín, que ya cuentan con insignes galerías centradas en el sexo.

Pero la exhibición de Moscú no ha querido ser una más, y ha decidido transgredir cotas aún más altas «fichando» para sus piezas artísticas a todo tipo de líderes mundiales, también del pasado. Entre los protagonistas de la política internacional actual, Barack Obama y Vladimir Putin han centrado toda la polémica en un cuadro que los representa en medio de una escena plagada de referencias al sexo masculino, por partida doble en el caso concreto del mandatario ruso. Se trata de un óleo firmado por la artista Vera Donskaya-Khilko, de San Petersburgo, titulada «Lucha Libre».

El museo moscovita, abierto las 24 horas del día, es el más grande del mundo de su categoría tanto por su extensión como por el número de piezas exhibidas. El responsable del centro, Alexander Donskoi, fue alcalde de la ciudad de Arjangelsk. Su esposa, dedicada a la creación y venta de productos para adultos, fue la que le animó a crear este museo, según informa el blog de «España rusa». En el currículum de Donskoi también consta que fue encarcelado durante tres años bajo el cargo de haber utilizado un diploma falso.

Arte y piezas históricas
Antiguos grabados persas y tibetanos, muñecas hinchables y antiguos preservativos de la época soviética («de la fábrica de Bakovsky, tamaño 2, dos rublos», reza el cartel) jalonan las diferentes salas.

«Hemos querido crear un proyecto provocador. Queremos que la visita despierte las emociones. No es importante si éstas son negativas o positivas. Estamos seguros que el Museo tendrá una gran popularidad porqué el tema del sexo es importante para todos», dijo Donskoi.