García-Escudero califica de «Pactito Feo» el acuerdo social

Y pactito porque no quiso contar para su redacción con el resto de los Grupos Parlamentarios, y los sindicatos y empresarios no se sintieron especialmente a gusto con su firma», sentenció. El PP, que mantuvo ayer su primera reunión con el Gobierno para analizar ese pacto, sigue dejando claro cada día que pasa que no está dispuesto a vender barato su apoyo parlamentario al mismo, aunque tenga poco margen para desmarcarse, salvo que haya más grupos que se decanten en esa dirección. García-Escudero también acusó a Zapatero de ser el causante de que España esté en «permanente estado de auditoría» en un momento del habitual cara a cara que mantienen en las sesiones de control en la Cámara Alta. El choque entre Gobierno y PP creció ayer aún más a cuenta de la afirmación de Zapatero ante el Pleno de que había invitado personalmente a Rajoy a que se sumara a las negociaciones con sindicatos y empresarios, cuestión que fue desmentida categóricamente por el líder de la oposición, incluso mediante un comunicado de Génova.

Fuentes oficiales señalaron que el jefe del Ejecutivo sí que llamó a Rajoy durante las negociaciones con los sindicatos, pero que en ningún caso le invitó a sumarse a las mismas. En esa conversación Rajoy asegura que le dijo a Zapatero que el lugar adecuado para debatir era el Parlamento y el Pacto de Toledo, por afectar a las pensiones. El PP sólo admite que Zapatero y Rajoy estén dialogando sobre la reestructuración de las cajas de ahorros. Conclusión, discrepan hasta sobre de lo que hablan.