Londres

Juicio por el magnicidio de Bhutto

Benazir Bhutto ha sido una figura irremplazable en la política de Pakistán
Benazir Bhutto ha sido una figura irremplazable en la política de Pakistánlarazon

ISLAMABAD- Han pasado casi cuatro años del asesinato de la ex primer ministra Benazir Bhutto y todavía la Justicia paquistaní no ha condenado a los culpables del magnicidio. Ayer, por primera vez, la corte antiterrorista de Rawalpindi presentó una acusación formal contra siete imputados, entre ellos el ex superintendente de Policía, Khurram Shahzad, y otro antiguo agente del cuerpo, por su presunta responsabilidad en el atentado suicida que acabó con la vida de Bhutto a finales de 2007.

Además de Shahzad, la corte ha presentado cargos contra el ex jefe de la Policía de Rawalpindi, Saud Aziz, y cinco presuntos insurgentes islamistas como cómplices en el atentado suicida, vinculados con el movimiento Talibán de Pakistán (TTP), cuyo ex líder Beitulá Mesud, murió en un ataque con «drones» (aviones no tripulados) en agosto de 2009. Benazir era más que una figura política; su pasión y su carisma la convirtieron en un fenómeno de masas. Nadie en Pakistán duda en considerarla una «shahid» (mártir). Su muerte dejó un vacío irremplazable en el liderazgo del Partido Popular Pakistán (PPP), que no ha conseguido llenar su viudo, el presidente Asif Ali Zardari. En el informe de la comisión especial de Naciones Unidas que investigó la muerte, se determinó negligencia por parte de la Policía al no haberla protegido durante el mitin que dio en Rawalpindi la tarde de su muerte, el 27 de diciembre de 2007.

La complicada investigación del asesinato de la ex primera ministra paquistaní estuvo marcada por la falta de colaboración por parte del antiguo régimen. Incluso la ONU llegó a acusar en abril de 2010 al Gobierno del ex presidente paquistaní, Pervez Musharraf, de hacer fracasar de «forma deliberada» la investigación al borrar los primeros indicios en la escena del crimen a manguerazos con agua. El ex general Musharraf, exiliado en Londres, ha recibido varias notificaciones de arresto por parte del tribunal antiterrorista, pero hasta la fecha ha hecho caso omiso.
 

 

EE UU fulmina a un general por criticar a Karzai
El mando de la misión norteamericana en Afganistán, el general Peter Fuller, fue destituido el viernes tras criticar a Hamid Karzai en una entrevista periodística, en un episodio que recuerda a la degradación del general Stanley McChrystal. En un encuentro con «Politico», Fuller reprochó al Gobierno presidido por Karzai de estar «aislado de la realidad» y no valorar las labores norteamericanas en materia de Defensa. En concreto lamentó que se desprecie el «sacrificio en tesoro y sangre» que realiza la potencia norteamericana en el país asiático. El Pentágono fulminó a Fuller pese a disculparle por sus consideraciones «personales». El general estadounidense, John Allen, le ha relevado en su labor de entrenamiento a las fuerzas afganas.