Más de 4500 voluntarios en busca de la solidaridad en 150 supermercados

SEVILLA- Serán más de 4.500 personas, la mayoría jóvenes, las que se repartirán por los establecimientos comerciales. Se formarán equipos de diez voluntarios en turnos de cuatro horas: desde las tres de la tarde hasta el cierre de los supermercados la jornada del viernes y durante todo el día el sábado. Los voluntarios estarán ataviados con una camiseta identificativa y entregarán una bolsa a los clientes, para que depositen alimentos no perecederos. Las bolsas se irán almacenando en un contenedor, que serán llevados a un almacén ubicado en la avenida de La Raza. El próximo lunes se realizará la clasificación de los alimentos, que serán entregados a las entidades sociales y ONG habituales para que lleguen a los más necesitados.

La organización ha buscado voluntarios en las dos universidades sevillanas –la Hispalense y la Pablo de Olavide–, en las hermandades y cofradías, colegios y ha divulgado la campaña a través de las cuentas que tiene el Banco de Alimentos en Twitter y Facebook. También se ha desarrollado una intensa campaña en los medios de comunicación locales.

«Era una utopía conseguir tantos voluntarios», sostiene Ramírez, quien explica que el éxito de la movilización radica en el «boca a boca» de los ciudadanos, puesto que se trata de una iniciativa pionera en la ciudad y que se hará de manera simultánea en París, Lisboa y Barcelona. También se han recibido «cientos» de llamadas a la sede de la entidad. Los interesados pedían información sobre la forma de participar como voluntario. Según el responsable de la campaña, «la mayoría de las personas que colaborarán no han tenido antes ningún contacto con el Banco de Alimentos». Igualmente, el 80 por ciento de los participantes se han inscrito a través de la web de la entidad, por lo que internet ha jugado un papel muy importante en la divulgación de la iniciativa.

El albergue municipal duplica sus plazas
sevilla- La Delegación de Familia, Asuntos Sociales y Zonas de Especial Actuación ha puesto en marcha la campaña de «Ola de frío» para personas sin hogar y ha duplicado el número de plazas en el Centro de Acogida Municipal (CAM), adquiriendo camas de campaña o hamacas, además de sacos de dormir y colchonetas, ya que antes el descanso se realizaba en sillones. Esta campaña atiende de forma especial a las personas sin hogar durante los meses de más frío, especialmente a las personas en situación «cronificada, que sufren un gran deterioro físico y psicológico, que viven en cualquier lugar y que no utilizan la red de atención a personas sin hogar», según la concejal de Asuntos Sociales, Dolores de Pablo-Blanco, que añade que «se pretende que nadie pernocte a la intemperie».