Cristina Kirchner regala «pan y circo» a dos meses de las elecciones presidenciales

Buenos Aires- Todo ello a pesar de que la ley de reforma política argentina establece claramente que la realización de todo acto de gobierno «que pueda promover la captación de sufragio a favor» queda prohibida durante los quince días anteriores a la fecha fijada para la celebración de los comicios.
Pero la viuda de Néstor Kirchner hizo oídos sordos y, a tan sólo siete días de las elecciones primarias, donde se dirimirán los candidatos que podrán competir en las elecciones generales del próximo 23 de octubre, se saltó la ley a la torera, mostrando su vertiente política más populista.

Subidas
Entre las diversas subidas que anunció, Fernández de Kirchner incluye un aumento del 16,82% en las pensiones para todos los jubilados y ex combatientes de Malvinas. Ahora éstos cobrarán cerca de 250 euros de subsidio mínimo, una cifra irrisoria teniendo en cuenta que Argentina es el segundo país con mayor inflación del mundo (20% anual) sólo superado por Venezuela.
En cuanto al salario mínimo, los empresarios apuntan a un aumento escalonado del mismo de un 24 ó 25%, por lo que quedará establecido en unos 400 euros, aproximadamente.
El saco de los subsidios tampoco quedará vacío. Las asignaciones familiares y por hijo que perciben unos 6 millones de personas se incrementarán también en un 20%, que es lo que se estima que aumentó la cesta de la compra desde octubre del año pasado. De este modo, la asignación por hijo para millones de familias ascenderá a 300 dólares (50 euros por cada uno de ellos).

Comida gratis
Más llamativo resultó ver ayer a la presidenta regalando comida por las calles de Buenos Aires, al más puro estilo Evita Perón. Cristina no dudó en ponerse el mandil y repartir merluza, leche y carne en los barrios más desfavorecidos de la capital argentina.

Más fútbol
Por último, la mandataria peronista no podía olvidarse del «opio del pueblo», el fútbol. Este año el Gobierno incrementará la partida destinada a nacionalizar la Liga argentina, adquiriendo los derechos de televisión y emitiendo en abierto todos los partidos de la Selección Nacional.
Además, en 2011 entregará más de 100 millones de euros a la corrupta Federación de Fútbol Argentina y gastará otros 50 millones más en los diversos anuncios que se van a emitir durante los encuentros, destinados a destacar los logros de la era K.