Telefónica vende su filial Atento a un fondo americano por 1039 millones

MADRID- Telefónica sigue avanzando en sus planes de desinversión. La compañía de telecomunicaciones hizo ayer público el acuerdo al que ha llegado para vender su filial de atención al cliente Atento al fondo americano Bain Capital por 1.039 millones de euros. La operación incluye el pago aplazado de 110 millones y la concesión por parte de Telefónica de una financiación por otros 110. Además, la operadora ha rubricado un acuerdo marco de prestación de servicios que regulará su relación de servicios con Atento como proveedor de servicios por un periodo de nueve años.

Atento es número dos mundial en el segmento de externacionalización de procesos de negocio (BPO), lo que habría supuesto uno de los principales atractivos para que Bain Capital se haya decidido a cerrar su primera operación en España, según fuentes del mercado. En 2011 ingresó 1.802 millones de euros y logró un resultado bruto antes de amortizaciones de 161 millones de euros. La intención de venderla fue confirmada oficialmente por Telefónica a principios de verano dentro de su plan para lograr reducir su deuda, que ascendía a finales del primer trimestre a 58.310 millones.

Con la operación de Atento, la venta del 2% que tiene en Portugal Telecom, del portal de viajes Rumbo y de varias torres de antenas, la compañía española espera ingresar unos 1.500 millones de euros que unir a los 3.100 millones de euros que ya ha ingresado por desinversiones como las que ha realizado en Hispasat o Zon. Además, Telefónica también tiene proyectado colocar en bolsa parte del capital de su filial en Alemania para captar recursos.
Por otra parte, Standard & Poor's (S&P) ha colocado bajo vigilancia con perspectiva negativa la calificación de «BBB» que tiene otorgada a la deuda a largo plazo de Telefónica y la de «A-2» que tiene asignada a su deuda de corto plazo, debido a la rebaja del «rating» de la deuda pública española. La agencia rebajó el miércoles la nota de solvencia de España hasta «BBB-», sólo un escalón por encima del «bono basura».