Perseguido por el mundo del corazón

Tampoco ha sido un camino de rosas la relación de Ortega Cano con la prensa del corazón. Desde la muerte de Rocío Jurado, ha sido acusado de aprovecharse de la figura de la tonadillera para seguir en el candelero. Una de sus ex novias, Mari Carmen, con la que mantuvo una relación de 6 años, acudió a una televisión para desvelar los secretos del matador y aseguró haberse sentido traicionada. Además, recientemente en otro programa, su hermano Francisco y su sobrina Conchi declararon que podría ser homosexual y tener un problema grave con el alcohol. El diestro, que no pudo soportar más las difamaciones, se expresó con contundencia en una entrevista: «No soy maricón ni alcohólico, pido respeto, como yo respeto a todos». Incluso llegó a afirmar que «entre todos se están encargando de que muera pronto». Otro problema para Ortega Cano es la relación que mantiene actualmente con su hijo adoptivo, José Fernando, que, según parece, amenaza con reclamar, cuando cumpla 18 años, su parte de la herencia que dejó Rocío Jurado y volverse a su país de origen, Colombia.