Audiencia Nacional

Goirizelaia «fiadora» de los 50000 euros que ha pagado Otegi de fianza

Arnaldo Otegi ya sólo espera la sentencia del «caso Bateragune» para saber si seguirá en prisión o saldrá en libertad. El ex portavoz de la ilegalizada Batasuna hizo efectiva ayer la fianza de 50.000 euros que le impuso la Audiencia Nacional el pasado abril en la otra causa en la que está procesado (a la espera de juicio), la que investiga la supuesta financiación de ETA a través de las herriko tabernas (también conocido como «caso Batasuna»).

Otegi, junto a su abogada, durante su juicio por enaltecimiento del terrorismo en 2007
Otegi, junto a su abogada, durante su juicio por enaltecimiento del terrorismo en 2007larazon

La fiadora de Otegi, su abogada y ex dirigente de Batasuna Jone Goirizelaia, ha dado finalmente el visto bueno para que un «remanente» de 50.000 euros depositado en la «cuenta provisional de consignaciones» (resultado de otras fianzas impuestas al líder abertzale) se destine a cumplimentar ese pago en metálico.La defensa de Otegi recurrió la libertad bajo fianza, pero el pasado 30 de junio la Sección Segunda de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional rechazó ese recurso.

En su resolución, el tribunal –integrado por los magistrados Ángel Hurtado, Julio de Diego y José Ricardo de Prada– preguntó a la fiadora de Otegi si autorizaba que ese remanente de 50.000 euros se destinara, como pretendía su cliente, a cubrir la medida cautelar impuesta al ex dirigente batasuno. Para la Sala era «preciso que la fiadora manifestase su voluntad de asegurar con esa cantidad la actual fianza». Cumplimentado ese requerimiento, Gorizelaia contestó mediante exhorto a través de la Audiencia Provincial de Vizcaya «prestando expresamente el consentimiento para ello».

Medidas cautelares
De esta forma, ayer mismo la Sala resolvió dar por constituida la fianza, «que se considera bastante para garantizar la libertad», decretando la libertad provisional de Otegi por esta causa. El tribunal, no obstante, le prohíbe salir de España y le obliga a presentarse una vez por semana en el juzgado y a entregar el pasaporte (medidas cautelares ahora sin efecto dada su situación de prisión). Además, le advierte expresamente de que no puede participar en «reuniones, manifestaciones, actos públicos» y la formación de coaliciones o partidos similares a los ilegalizados HB, Batasuna y Euskal Herritarrok.

Pese al pago de la fianza, Otegi –en prisión desde octubre de 2009– seguirá en la cárcel pendiente de la sentencia del juicio que le sentó el banquillo recientemente por su supuesta participación en los intentos por reflotar Batasuna a través de Bateragune. El tribunal, que ya ha comenzado sus deliberaciones, las continuará a la vuelta de las vacaciones, según aseguraron fuentes jurídicas, por lo que Otegi pasará el mes de agosto en prisión. El otro frente judicial que amenazaba a Otegi, el juicio por un supuesto homenaje al etarra José María Sagarduy, se ha despejado (a la espera de lo que diga el Supremo), pues la Audiencia le ha absuelto del delito de enaltecimiento del terrorismo del que estaba acusado. En el «caso Batasuna» –en el que están procesados 41 dirigentes de la izquierda abertzale–, Otegi se enfrenta a una petición fiscal de doce años de prisión por un delito de integración en organización terrorista.

Vía libre al acto de Azpeitia denunciado por proetarra
El juez de la Audiencia Nacional Eloy Velasco rechazó ayer prohibir –como le reclamó Dignidad y Justicia (DyJ)– un acto previsto para hoy en Azpeitia (Guipúzcoa) con motivo de las fiestas de San Ignacio. Según el magistrado, no se trata de un homenaje a miembros de ETA (como mantiene la asociación que preside Daniel Portero), por lo que debe prevalecer el derecho de reunión. En su resolución, el juez Velasco ordena no obstante el «control y vigilancia policial» del acto, organizado por una plataforma vinculada a Etxerat (el colectivo de apoyo a los presos de ETA), para evitar cualquier acto «de apoyo u homenaje» a miembros de la banda terrorista. En ese caso, pide a los agentes que detengan a los responsables, Para Dignidad y Justicia el acto –al igual que el organizado por la misma plataforma en Loyola el próximo lunes– suponen «claros actos de enaltecimiento del terrorismo organizados bajo el disfraz» de la ilegalizada Askatasuna.